KIA Forte GT Sedán 2020 es el rival incómodo

KIA Forte GT Sedán 2020 es el rival incómodo
Por:
  • Esau.Ponce

El Forte es uno de los pilares más fuertes para la marca. Es cierto, desde que apareció la primera generación en 2008, siempre ha sido un sedán familiar, pero también fue concebido con un objetivo: atraer a los jóvenes a la marca.

El KIA Forte GT Sedán 2020 conserva la practicidad que otorga la carrocería sedán. De hecho, sus medidas y habitabilidad no cambian en nada. En el tiempo que lo tuvimos a prueba comprábamos la capacidad de cajuela anunciada de 434 litros. Y vaya que pudimos cargar varias cosas. Pero no hay nada mejor que una imagen para que lo compruebes.

En materia estética, los diseñadores de KIA se las ingeniaron para dotarlo de una imagen deportiva con apenas agregar un par de cambios. A primera vista, luce como un Forte GT-Line, pero añade elementos exclusivos como una parrilla más agresiva con vivos rojos y con marco en cromo oscuro, grupos ópticos LED, entradas de aire funcionales, doble tubo de escape, así como alerón, rines de 17” y difusor trasero, estos últimos en un contrastante tono negro.

Otro destacado son los insertos de aluminio en el volante, palanca de velocidades y en el tablero. Sin duda, la experiencia a bordo es mejor que, por ejemplo, un Sentra Nismo, pero está por debajo de un Volkswagen Jetta GLI.

Además, cuenta con cargador inalámbrico para smartphone, aire acondicionado con funcionamiento automático de doble zona, así como KSA para poder conectar la funcionalidad con MyKIA+. El sistema de audio de 320 watts está firmado por Harman Kardon.

Respecto a seguridad, se incluye asistente de arranque en pendientes, 6 bolsas de aire, control electrónico de estabilidad (ESC), frenos ABS, sistema de anclaje ISOFIX, sistema de gestión de estabilidad (VSM) y frenos de disco en las cuatro ruedas.

Como hemos visto, un Gran Turismo es un automóvil que al combinar potencia y confort es ideal para su uso diario. Vamos, en pocas palabras, es rápido y confortable, pero se olvida un poco del carácter racing. Y sí, este Forte GT es precisamente esto.

Al igual que su hermano hatchback, bajo el cofre del Forte GT Sedán encontramos un motor 1.6 L Turbo GDI capaz de entregar 201 hp y 195 lb-pie de torque, el cual, en este caso, se acopla en exclusiva a una transmisión automática de doble embrague de siete relaciones. Según KIA, este conjunto le permite acelerar de 0 a 100 km/h en 7.5 segundos.

Dejando a un lado la teoría, en la práctica el Forte GT presume una puesta a punto al gusto de los entusiastas de la conducción. La suspensión se nota lo suficientemente firme como para saber que es lo que pasa en las ruedas, pero tampoco es una tabla seca, de hecho, es bastante indolente cuando transitamos por caminos en mal estado. Los asientos son un poco duros, algo que me gustó, pero no a todos los miembros de la redacción.

Al momento de acelerar, se hace presente un ligero retraso del turbo, pero cuando éste entra en acción se siente una aceleración progresiva, eficiente y divertida. Sin duda, es más rápido que el Sentra Nismo, pero es ligeramente más lento que el Jetta GLI. Si quieres un deportivo “arranconero” debes voltear a ver a otro lado. Aquí estamos más ante un atleta familiar que responderá en todo momento que ante un loco velocista.

El dato: Pese a su carácter deportivo, también es eficiente. La marca anuncia una eficiencia de combustible es de 17.07 km/l.

En montaña o zona de curvas, se sigue con la misma cantaleta. Sorprende lo bien que es llevarlo, ya que la dirección, además de firme y comunicativa, apunta a donde se le indica. Para mantener todo bajo control, el Forte Sedán GT recurre a un sistema de suspensiones McPherson adelante, mientras que la trasera es independiente multibrazo. Esta configuración, junto a las características propias de un sedán, le permite tomar las curvas mejor plantado que el hatchback.

Algo que se agradece en los KIA GT es que las asistencias te dejan jugar cuando buscas el límite y sólo actúan cuando de verdad detectan que la situación podría salirse de control. Aun así, su accionar no es dramático, pero sí efectivo. Aunque el subviraje se haga presente puedes tener la seguridad de que, con un poco de pericia de tu parte, el Forte retomará el camino.