La jefa de gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, confirmó este viernes que el semáforo naranja permanecerá durante la siguiente semana, toda vez que la capacidad hospitalaria en la capital y zona metropolitana continúa disminuyendo al paso de los días.
“Los principales indicadores de la evolución de COVID-19, siguen en la reducción de la capacidad hospitalaria, tanto en intubados como no intubados, y en la zona metropolitana también se registró una reducción”, destacó en videoconferencia desde su hogar donde permanece en cuarentena.
Ayer ya se había adelantado que la capital seguiría en semáforo naranja.
Este viernes, Sheinbaum señaló que de cada cien personas que se realizan la prueba, 25 son positivas, mientras que en meses anteriores el número llegaba a 50 por ciento.
Informó que desde este viernes se enviará a todos los usuarios de telefonía celular un mensaje para detectar e identificar a personas con la enfermedad para resguardarlas y evitar que se ponga en riesgo a más población.
“La pandemia no ha terminado y es responsabilidad de todos protegernos, por ello hay que cuidarnos todos”.
Destacó que por el momento no abrirán nuevas actividades ya que esperan el análisis de las que se aperturaron la semana pasada y de seguir en un camino adecuado, se pensará en dar cabida a otras pero de manera paulatina.
Enfatizó que si bien las camas que se recuperan para pacientes no COVID-19, la infraestructura se queda para ser recuperada en caso de que se tuviera una nueva demanda de hospitalizaciones, pues el equipamiento no desaparece, sino que a las camas son ocupadas para otros padecimientos o enfermedades.
Los hospitales de Xoco y Balbuena ya no se encuentran recibiendo a pacientes con el virus, pues están ya priorizando la atención a otros pacientes con otros padecimientos y urgencias, pero cuando llegan, son trasladados a otros nosocomios para su atención.
fgr