Plan A: Marcelo presidente

Aunque muy pocos lo creen, incluyendo en su propio equipo, el escenario político más viable para 2012 es que Marcelo Ebrard llegue a la Presidencia de la República y el plan ya está en marcha.

Quienes se limitan a ver al PAN, PRI y PRD como los únicos que animarán la fiesta, no han querido percatarse de que lo que se está gestando desde ahora es una gran alianza de centro-izquierda que catapultará a Marcelo a Los Pinos.

Al frente está Manuel Camacho Solís, quien construye una plataforma que dé cabida a políticos, ciudadanos, líderes y empresarios de corte progresista, sin importar su color.

Con la mano en la cintura despojó a Andrés Manuel López Obrador del FAP y lo transformó en el Diálogo por la Reconstrucción de México (DIA), para unir a la izquierda en un solo proyecto más allá de El Peje.

Camacho promueve las alianzas electorales del PRD con el PAN en varios estados para debilitar al PRI. Pero no sólo hace boquetes al tricolor, sino que provoca división al interior del blanquiazul y aísla a López Obrador.

El PRI ya resintió el golpe y aceleró su lucha interna, en la que Enrique Peña Nieto ya no ve tan segura la candidatura; en tanto Marcelo, jefe de los alcaldes del mundo, recibe a Clinton y toma café con Obama. De seguir así, a la hora de elegir al candidato de la izquierda no habrá nadie que haga sombra a Marcelo; El Peje dirá que la mafia lo dejó fuera, se radicalizará y será el candidato del PT, al que garantizará su registro y prerrogativas.

Eso permitirá a Ebrard quitarse el lastre que le representa el tabasqueño. Para entonces el DIA será una gran alianza nacional de fuerzas progresistas de todos los partidos, que buscará sumar a intelectuales, empresarios y líderes como Carlos Slim, Enrique Krauze y Cuauhtémoc Cárdenas, por ejemplo. Lanzará en el DF a alguien como Juan Ramón de la Fuente, que le daría a Marcelo el toque de candidato de la sociedad civil, con la bendición de la izquierda, las clases medias, los empresarios y hasta los gringos. En este escenario las posibilidades de Ebrard serían muy amplias, pues los ciudadanos están desilusionados del PAN, le tienen fobia al PRD y no olvidan que el PRI, al que ven como el menos peor, es un partido corrupto. Si Marcelo se posiciona como la opción de una izquierda moderna tipo Lula da Silva, que ha hecho a Brasil un gigante; o la de Chile, que llevó al país al desarrollo con políticas económicas y sociales más humanas, su triunfo estaría asegurado.

Con De la Fuente como compañero y con el apoyo de Elba Esther, por ejemplo, la alianza tendría también la capital del país. Las cámaras, la ALDF y el gobierno estarían repletos de personajes como Lázaro Cárdenas, José Woldenberg, Emilio Álvarez Icaza y muchos otros. Si se concreta la alianza, Marcelo estará en Los Pinos… si no, tiene un Plan B…

 CENTAVITOS… ¿Para qué se reunieron el viernes por la noche Joel Ortega, René Bejarano y varios diputados locales afines al de las ligas? Sobre todo porque los dos han tenido problemas con Marcelo.

jadrian02@yahoo.es

agp