Profeco: Ombudsman del comercio electrónico

Recientemente participé, en mi carácter de procurador federal del Consumidor, en dos eventos de gran importancia que tuvieron como sede la ciudad de Cancún, Quintana Roo: el IV Congreso Latinoamericano de Telecomunicaciones y la Reunión Ministerial de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) 2016 sobre Economía Digital.

Debo decirles con satisfacción, que es la primera vez que en foros de esta magnitud se incorpora la visión de los consumidores de comercio electrónico y se habla sobre la importancia de que sus derechos sean incluidos en los debates sobre marcos regulatorios y normas de seguridad.

Hay una coincidencia temática a nivel global sobre el comercio en línea y se llama confianza.

Esto nos lleva a una reflexión para darle certidumbre a quienes realizan compras por Internet y lo mínimo que esperan es que la seguridad en las operaciones con sus tarjetas de crédito y el respeto a su identidad sean plenos.

Por tal razón, en ambos foros internacionales me pareció oportuno hacer hincapié en que la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) está llamada a ser el ombudsman de los compradores en línea, un defensor siempre alerta.

Pero ¿por qué dar atención especial a este segmento? La respuesta está a la vista: su crecimiento es vertiginoso.

Tal vez hace dos décadas hubiera sido difícil imaginarlo, pero hoy México ocupa el lugar número 17 a nivel mundial como uno de los países más atractivos para el comercio electrónico.

Simplemente, el año pasado se realizaron operaciones por un monto de 12.2 billones de dólares en transacciones a través de la red y, para finales de 2016, se calcula que esta cifra se incrementará en un 30%. ¿Sabían ustedes que existen tiendas departamentales en México cuyo volumen de ventas es mayor a través de Internet que por los medios tradicionales de compra?

En la actualidad, somos más de 62 millones de mexicanos con acceso a Internet. ¡Sesenta y dos millones de clientes potenciales del comercio electrónico! De ese tamaño es el reto que Profeco tiene que atender.

La Procuraduría realiza un monitoreo permanente para verificar que las condiciones de compra por esta vía se hagan con información clara y suficiente.

De 2004 a la fecha se han revisado mil 368 tiendas virtuales que sí cumplen con los parámetros de información; sin embargo, la Profeco ha detectado que existen 278 páginas de Internet dedicadas a las ventas en línea que no presentan información básica y constituyen un riesgo para los usuarios.

Estos datos pueden ser consultados en la página de Internet profeco.gob.mx en el apartado “Educación y Divulgación”, donde aparece la opción “monitoreo de tiendas virtuales”.

Con la instrucción del Presidente Enrique Peña Nieto y el secretario de Economía, Ildefonso Guajardo, se creó en Profeco hace 8 meses la Subprocuraduría de telecomunicaciones, para atender debidamente a los usuarios, en un segmento que merece atención específica.

Hay que decir que Telecomunicaciones es el rubro que concentra el mayor número de quejas en la Procuraduría, con 18 mil 391, en los primeros 6 meses de 2016, y no resulta extraño si tomamos en cuenta que existen 225 millones de contratos entre los de telefonía celular, telefonía fija, televisión de paga e Internet en nuestro país.

En el contexto de la economía digital, a mayor cantidad de transacciones comerciales en la red, mayor debe ser la presencia de la Profeco, el ombudsman de los consumidores en línea.

Twitter: @ErnestoNemer

Procurador federal del Consumidor.