Ocho años después de encontrar los restos de una mujer embarazada del siglo VII o VIII, en Imola, Italia, los investigadores de la Universidad de Bolonia y Ferrara dieron a conocer las causas del extraño suceso llamado “parto de ataúd”, que ocurre cuando el feto es expelido del cuerpo de la madre después de la muerte; se origina porque algunas veces el gas que se genera durante la descomposición del cuerpo se acumula hasta a tal punto, que el feto es expulsado por la fuerza de éste.
