Montezuma, la obra que marca el regreso de la ópera a Bellas Artes

Con la obra Montezuma, de Carl Heinrich Graun, la ópera semiescenificada regresa en pandemia al Palacio de Bellas Artes para conmemorar los 500 años de la caída de Tenochtitlan. Uno de los mayores retos que tienen los cantantes es transmitir emociones al público y contar la historia sin tener ningún tipo de contacto en el escenario, compartió a La Razón la soprano Karen Gardeazábal, quien hace su debut en el recinto de mármol.

“El gran reto que tenemos en la producción es que sin mirarnos, sin tocarnos y sin estar cerca, tenemos que hacer sentir al público y lograr que se entienda lo que estamos interpretando, la historia que queremos contar. Es la parte más complicada porque uno está habituado a que si hablas de amor abrazas a la pareja, le tocas las manos, y en este momento, no podemos siquiera mirarnos a los ojos”, señaló Gardeazábal.

La soprano, originaria de Toluca, interpreta a Eupaforice, reina de Tlaxcala y prometida de Montezuma, emperador de México. Destacó que su personaje es una mujer fuerte y aguerrida, como son las mexicanas.

“Es una mujer fuerte y aguerrida, siempre viendo por su comunidad, su país, apoyándolo en todo, haciendo lo que está en sus manos, incluso hasta perder la vida para estar con Montezuma y con el pueblo mexica”, señaló Gardeazábal, quien recientemente interpretó el papel de Mimí en La bohème.

La ópera Montezuma, cuyo libreto es de Federico II de Prusia, fue escrita originalmente para cantantes castrati, hombres que eran castrados para mantener la tonalidad de su voz aguda, por lo que generalmente se recurre a un elenco conformado mayoritariamente por mujeres.

“Venía de cantar hace mes y medio Mimí, que es más lírica, en cambio Eupaforice demuestra mucha bravura, es muy apasionada. Interpretar a una mujer fuerte, en algunos momentos enojada, con esta energía y pasión, pero a la vez hacer una voz ligera que pueda resolver lo que está en la partitura, es uno de los mayores retos”, destacó la soprano.

El montaje está inspirado en la Historia de la Conquista de México, Población y progresos de la América Septentrional, conocida por el nombre de Nueva España (1684), de Antonio de Solís. Plantea una alianza entre los tlaxcaltecas y el imperio mexica.

“Lo que más me ha gustado es que en el libreto Eupaforice es la primera que se da cuenta que los españoles no vienen en son de paz, sino a acabar con tradiciones y religión, lo empieza a ver en la naturaleza, los dioses le van diciendo”, resaltó Gardeazábal.

Bajo la batuta de Iván López Reynoso, titular de la Orquesta del Teatro de Bellas Artes y la dirección escénica de Ruby Tagle, se presenta el 23, 26 y 28 de septiembre y el 3 de octubre en el palacio.

“Canto hasta con traje de astronauta”

Para la soprano Karen Gardeazábal todavía hasta diciembre del año pasado había demasiada incertidumbre respecto a la reapertura de los teatros en el mundo, por ese motivo pasó por su mente dedicarse a otra cosa: poner un negocio y vender o hasta dar clases de inglés.

“Al principio fui muy incrédula, decía va a pasar en 15 días, estaba en España, en Valencia, pero después los compromisos que tenía se iban cancelando entonces venía el estrés. Hablaba con mi familia y le comentaba ‘me tengo que dedicar a otra cosa porque esto se va a acabar, no hay teatros’”, aseguró.

Por eso ahora que ha podido volver a escenarios de Europa y ahora a los de México afirma que así tenga que cantar con traje de astronauta lo hará con tal de retomar su labor.

“Hoy gracias a Dios y a la vida, que después de este tiempo estoy haciendo mi debut en el Palacio de Bellas Artes y con la primera ópera en pandemia. Estaré aunque sea con traje de astronauta, no importa, con tal de seguir con el proyecto y, por supuesto, que haya seguridad para el público”, indicó.