VIDEO: Patrick Mahomes cumple con la tradición y desfila en Disney tras ganar el Super Bowl

Mientras los Chiefs regresaron a Kansas City tras ganar el Super Bowl 2023, Patrick Mahomes estuvo en el parque temático de Disney para cumplir con la tradición establecida en 1987, la cual indica que el ganador del MVP del Super Bowl visita el complejo ubicado en Orlando, Florida.

Mahomes comandó a los Chiefs a la voltereta ante los Philadelphia Eagles en el Super Bowl celebrado en Arizona y tras ganar el partido 38-35, el quarterback ganó su segundo MVP del Super Bowl de la NFL.

El mariscal de campo regresó a Disneyland con su familia para desfilar por el parque temático. La primera vez que el jugador de 27 años fue a Disney como MVP del Super Bowl fue en 2020, cuando recibió el trofeo del partido en el que Kansas City derrotó a San Francisco.

¿Por qué los ganadores del SB dicen 'Nos vamos a Disney'?

Cuando un equipo gana el Super Bowl de la NFL es tradición que se escuche la frase: "Voy a ir a Disney World", pues el partido por el trofeo Vince Lombardi tiene una estrecha relación con el parque de diversiones que se encuentra en Orlando.

El ganador del MVP (Jugador Más Valioso) del Super Bowl suele visitar Disney World y lo hace normalmente con uno de sus compañeros. Este año el ganador de dicho reconocimiento fue el quarterback de Kansas City Chiefs Patrick Mahomes.

Todo comenzó gracias a Michael Eisner, CEO de Disney, y su esposa Jane Breckenridge, quienes cenaron con Dick Rutan y Jeana Yeager, una pareja de aviadores que recorrió el mundo entero sin escalas.

Breckenridge le preguntó a los pilotos qué sería lo siguiente que harían y ellos respondieron: “Vamos a ir a Disney World”. Fue esta frase la que dio la idea para que en el Super Bowl se promocionara. Disney y la NFL llegaron a un acuerdo para que el MVP del Super Bowl dijera la frase.

Desde ese momento, jugadores que han ganado el reconocimiento como Tom Brady, Peyton Manning, Drew Brees, Patrick Mahomes, Eli Manning, entre otros, han acudido al parque temático en Orlando.

La primera vez que se dijo la frase fue en 1987, cuando el mariscal de campo Phil Simms, de los New York Giants, ganó el Super Bowl XXI y, de acuerdo con reportes, MVP del Super Tazón gana de 30 a 50 mil dólares por decir la frase.

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