Amazon renueva a La maravillosa señora Maisel

¿Recuerdan esa frase que dice que no hay que volver al lugar donde uno ha sido feliz? Lo mismo pasa con las segundas temporadas de las series; cuanto más idolatramos la primera parte, más posibilidades hay de decepcionarnos con la segunda. Cuantas más expectativas pongamos en la continuación, más enojo genera el vernos desilusionados. Tanto en la ficción como en el amor, las segundas partes son polémicas, cuestionables y hasta poco recomendables. Ésta era la idea que rondaba en mi cabeza antes de ver la segunda temporada de La maravillosa Sra. Maisel, recién estrenada en la plataforma de streaming de Amazon Prime Video.

Afortunadamente, los prejuicios están para romperse, y no hay nada más satisfactorio que comprobar, una vez más, la destreza con la que han escrito, dirigido y actuado una de las que, sin lugar a duda, es de las mejores producciones de este 2018.

Noches en las que desearíamos que nos pasaran la mano por el lomo, y en las que súbitamente se comprende que no hay ternura comparable a la de acariciar algo que duerme.

Oliverio Girondo

La segunda temporada viene de la mano de nuevos desafíos, conflictos y dificultades que se irán presentando a lo largo de diez capítulos mientras nos reímos con ellos (y de ellos también). Midge (Rachel Brosnahan) ha evolucionado y su carrera de comediante se perfila con éxito, sin embargo, en esta nueva etapa será necesario enfrentar las consecuencias de las decisiones que ha tomado respecto a su vida, su profesión y sus prioridades. Por otro lado, Abe (Tony Shalhoub) y Rose (Marin Hinkle), padres de Midge, atravesarán una profunda crisis en la cual quedará demostrado que sus personajes no son unilaterales ni planos: como en la vida, tendrán sus contradicciones, desilusiones y matices, rompiendo el estereotipo de la perfecta ama de casa y el estricto investigador universitario a través de la pluma de Amy Sherman-Palladino, guionista de La maravillosa Sra. Maisel, que ha delineado personajes complejos y entrañables, con las palabras justas con el timming correcto.

Habrá nuevos amoríos, viajes a París, programas de televisión y algunas sorpresas. Más allá de las risas, también habrá lugar para los grandes dilemas que desfilarán por la mente de nuestra protagonista y, en consecuencia, por la nuestra también. El miedo a la soledad aparecerá con una contundencia desoladora y hará resonancias en todos aquellos que, por haber elegido cierta profesión, hemos renunciado a más de una cosa en el camino. El deseo y la contradicción como aliados indisolubles que nos confunden, nos enojan, nos problematizan. El miedo a ser juzgado que nos lleva a escondernos y mostrarnos, como no somos antes de ser aquello que creemos ser. En definitiva, lidiar con los “debes” heredados, los “deberías” adquiridos y los “tendrías” de un mundo que, aunque maravilloso, a veces se vuelve hostil e intransigente.

Si todavía no vieron la segunda temporada, están muy a tiempo de cerrar el año con broche de oro. Si aún no vieron ni la primera ni la segunda, ya es momento de darle una oportunidad a esta comedia vintage que les sacará más de una risa, y quizás hasta algunas lágrimas. Si ya vieron todo y están como yo, deseosos por saber cómo continúa la historia, les mando unas palabras de aliento, un abrazo solidario y toneladas de paciencia porque, aunque la tercera temporada está confirmada, aún no tenemos fecha de estreno.

Exitosa historia

10 Capítulos desarrollan la segunda parte

Simone

A mitad de camino a la ciudad media

La sala de castigo

¡Vamos a las catskills!

Medianoche en la concordia

Afrontemos la música y el baile

Mira, ella hizo un sombrero

Someday...

Vota por Kennedy, Vota por Kennedy

Todo solo