Noche de fuego: ¿Por qué ver la aclamada película de Tatiana Huezo?

Luego de consolidarse como una de las referencias dentro del actual panorama cinematográfico, sorprendiendo al mundo con su capacidad para diseccionar el entorno social elaborando secuencias en donde el testimonio adquiere una dolorosa belleza, Tatiana Huezo —“El lugar más pequeño” (2011), “Tempestad” (2016)—, da el salto a los parajes de la ficción y el resultado, “Noche de fuego” es más que afortunado.

Esto porque, aunque para hacerlo decide recargarse en una corrección técnica que contiene un tanto el virtuosismo visual al que nos tiene acostumbrados, por el otro su vena documental explota en diálogos sin desperdicio y de una naturalidad apabullante, esos que sólo puede encontrar y elaborar quien se ha sumergido a fondo en los temas que plantea, pero que además posee la agudeza y sensibilidad para que la honestidad se conjugue a la perfección con la construcción cinematográfica en un relato tan seductor en su trayecto, como devastador en su trasfondo.

“Noche de fuego” se vale de la mirada de una niña para recrear la provincia mexicana que agoniza entre la ineficacia e indiferencia de las autoridades y el acoso criminal, mostrando la presencia de ambos bandos a través de una cámara furtiva, en contraste con visiones de los juegos infantiles y las inquietudes adolescentes que se asoman a pesar de obedecer a una feminidad asfixiada por el miedo.

Con ello logra dimensionar el acoso normalizado como una idea despiadada, que infecta el ambiente, acentuando así la crudeza del hecho tanto en su proceso como en su culminación.

Del mismo modo, con lúcidas imágenes de lo cotidiano, que por momentos se permiten apuntar a lo conceptual, rayando a la evocación desencantada a través de un sugestivo diseño de sonido; hace una exposición de la amistad y la complicidad madre e hija, trastocada por la violencia.

La convicción del reparto, que incluye a Mayra Batalla y Norma Pablo, quienes evitan innecesarios aspavientos, corresponde a la perfección con el espíritu de compromiso que la propuesta lleva hasta sus últimas consecuencias.

Así pues, “Noche de fuego” es la confirmación de la capacidad de una cineasta para pasar del documental a la ficción sin perder en ningún momento el poder de su discurso, uno de infranqueable vigencia, encontrando la universalidad que se convierte en su mejor herramienta para ser transmitido.

Galardona con la Mención Especial del Jurado del Festival de Cannes, "Noche de fuego" llega a la cartelera y es uno de los grandes estrenos no solo del fin de semana, sino de este 2021.