Climatarios, el nuevo estilo de vida para cuidar al planeta

Una nueva tendencia de estilo de vida está cobrando popularidad a nivel mundial, ya que busca enfocarse en transformar los hábitos alimenticios, principalmente, para reducir el impacto del cambio climático y la contaminación.

Se trata de los “climatarios”, que son aquellas personas que eligen consumir alimentos que sean menos dañinos para el medio ambiente, aunque también se preocupan por cuidar el agua, generar menos basura y reciclar.

Este término surgió en el 2015, cuando el diario The New York Times registró un nuevo grupo de consumidores cuyo objetivo era revertir el cambio climático.

Los pilares de esta tendencia están basados en las recomendaciones que ha emitido la Organización de las Naciones Unidas (ONU) para ayudar a afrontar la crisis climática.

Según el organismo internacional, la cantidad de emisiones de gases de efecto invernadero por persona al año es alta y varía con respecto a cada país, por ejemplo, en Estados Unidos, las emisiones en 2020 fueron de 14.6 toneladas de dióxido de carbono por persona, más del doble de la media mundial de 6.3 toneladas, y seis veces más que las 2.4 toneladas por persona de la India.

La ONU señala que para conservar un clima habitable, la media de emisiones por persona al año tiene que bajar a alrededor de 2 a 2.5 para el 2030.

En ese sentido una de las recomendaciones del organismo es modificar los hábitos alimenticios, que es en lo que se basan los “climatarios”. Sugiere comer más verduras, frutas, cereales integrales, legumbres, frutos secos y semillas, y menos carne y productos lácteos.

La producción de alimentos de origen vegetal suele generar menos emisiones de gases de efecto invernadero y requiere menos energía, tierra y agua. La ONU indica que cambiar de una dieta mixta a una vegetariana puede reducir la huella de carbono en hasta 500 kilogramos de dióxido de carbono al año, o en hasta 900 kilogramos si es una dieta vegana.

Los “climatarios” también apuestan por el consumo local por la proximidad, ya que consideran que cuanto más cercanos están los productos naturales, más disminuyen su huella de carbono, a veces, incluso, tienen su propio huerto en donde cultivan ellos mismos.

Asimismo, buscan aprovechar al máximo todos los alimentos y tirar los menos posibles, ya que al desperdiciar la comida, también se desaprovechan los recursos y la energía que se utilizaron para cultivarla, producirla, envasarla y transportarla. Y cuando los alimentos se pudren producen metano, un potente gas de efecto invernadero. Por lo tanto se recomienda reciclar los desechos o convertirlos en abono.

Por otra parte, también optan por usar medios de transporte sustentables, por ejemplo, en la medida de lo posible elegir desplazarse en bicicleta o compartir viajes en auto, incluso, algunos consideran la posibilidad de adquirir un coche eléctrico, que causan menos emisiones de gases de efecto invernadero que los vehículos de gas o diésel, lo que podría disminuir la huella de carbono en hasta dos toneladas de dióxido de carbono al año.

Los “climatarios” apuestan a eliminar de su estilo de vida el uso de plásticos como envases, bolsas, botellas, entre otros, además de que eligen productos ecológicos o biodegradables, es decir, de empresas que utilicen los recursos de forma responsable y se comprometan a reducir sus emisiones de gases y residuos.