Resulta que el Gobierno de Coahuila, encabezado por Manolo Jiménez, puso a remate un avión que apenas había comprado hace año y medio, porque dejó de ser útil para los fines que motivaron su adquisición. El gobernador ordenó que con lo que se obtenga se compre un helicóptero que sirva para combatir incendios forestales. El problema es que Coahuila está muy lejos de enfrentar una crisis de este tipo, pues en lo que va del año no se ha registrado un solo siniestro. Pero las rarezas en este asunto, nos cuentan, empezaron desde la compra del avión. Supuestamente era para reforzar las labores de seguridad pública, pero se trata de un jet diseñado para transporte de pasajeros. Muchos se preguntan qué podría aportar una aeronave así a las labores de combate a la delincuencia. Pero bueno, el jet costó 45 millones 820 mil pesos del erario coahuilense. Ahora habrá que ver cuánto se obtiene de su remate, y qué uso se dará a lo que se adquiera con ello.

