Todo parece indicar que, como han vaticinado los analistas, las resistencias más fuertes a la reforma electoral que impulsa Morena vendrán desde adentro de la 4T. Ayer, la dirigente nacional del PVEM, Karen Castrejón, dejó claro que su partido “es un aliado que analiza y revisa”, lo que significa que no es un hecho que apoyarán el proyecto. Se entiende, porque, históricamente, la gran mayoría de los diputados y senadores que ha tenido el tucán han sido plurinominales, una figura que ahora se pretende acotar o de plano desaparecer. Y durante años, el partido ha recibido millones de pesos en financiamiento, incluso cuando obtenía votaciones menores a las de los últimos tiempos, otro aspecto que estará a revisión. Por si fuera poco, vienen las definiciones de cara al 2027, y el PVEM tiene interés específico en algunos cargos que estarán en juego. Lo que queda claro hasta el momento, nos comentan, es que, desde ahora, el Verde busca vender aún más caro su amor.

