Instituciones de educación privada

Académicos acusan un desprecio por la ciencia

El Tecnológico de Monterrey, la institución privada con más investigadores afectados, tiene programas de nanotecnología, ingeniería y óptica

Investigadores de la UNAM analizan propiedades del propóleo
Investigadores de la UNAM analizan propiedades del propóleoFoto: UNAM
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La decisión del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt) de cancelar los convenios con instituciones de educación privada refleja un desprecio a la ciencia en México, coincidieron los investigadores afectados por esta medida.

El Tecnológico de Monterrey, la institución privada con más investigadores afectados, tiene programas de nanotecnología, ingeniería y óptica, además del área de ciencias sociales, señaló Salvador Venegas Andraca, investigador nivel II especialista en cómputo cuántico.

“Los fondos que el Conacyt tiene para financiamiento de proyectos de investigación están siendo canalizados a algunas instituciones públicas, ni siquiera es a todas”, declaró.

Miguel Ángel Méndez Rojas, profesor del departamento de Ciencias Químicas y Biológicas de la Universidad de las Américas Puebla (UDLAP), expuso: “este tipo de acciones lo que hace es fragmentar un sistema de investigación nacional que de por sí ya se encuentra bastante disminuido”.

Entre los proyectos de la UDLAP están el acceso a agua potable y modelos de negocios en comunidades marginadas; detección temprana de leucemia, cáncer de mama y cervicouterino. Y estrategias educativas en lugares de difícil acceso y pueblos indígenas.

Por su parte, los investigadores del Instituto Tecnológico Autónomo de México aportan sus conocimientos al Centro ITAM-Covid, donde abordan economía, epidemiología matemática, vacunas contra el virus.

“A largo plazo mucha gente no va a tener las ganas y la motivación de hacer investigación porque el trabajo no se está apreciando, no se está pagando”, advirtió Rubén Martínez Avendaño, integrante del SNI nivel II del ITAM.

En tanto, Genoveva Rosano Ortega, investigadora en Ingeniería de la Universidad Popular Autónoma del Estado de Puebla (UPAEP) expuso que el retiro del estímulo no sólo la afecta como investigadora, sino como madre de familia.