Desata muerte de Coronel amenazas

Desata muerte de Coronel amenazas
Por:
  • larazon

Redacción / La Razón

A partir de la muerte de Ignacio Nacho Coronel, el jueves pasado, algunas instalaciones de la Policía de Guadalajara han recibido amenazas mediante llamadas telefónicas, aseguró ayer el director de la corporación, Servando Sepúlveda Enríquez.

“Se ordenó reforzar la vigilancia de las instalaciones de bases de la Policía ya que en estos días se recibieron algunas amenazas telefónicas, tanto en el área del centro de mando de la calzada, como en otras instalaciones de la corporación”, indicó.

El funcionario estatal agregó que en caso de que se confirme la existencia de narconóminas en las que aparecen policías locales, éstos serán castigados por su colusión con el crimen organizado.

“Yo siempre he dicho que se preocupen los que tengan que preocuparse por este tipo de información”, indicó el jefe policiaco.

“Y si esto es cierto y resulta efectivo, después de que las autoridades competentes hagan las investigaciones correspondientes, tendrá que actuarse sobre cualquier persona que se le demuestre que tiene alguna relación con estos grupos”, dijo.

Al referirse a los señalamientos de que Ignacio Coronel contaba con protección oficial, Sepúlveda Enriquez señaló que en caso de que así fuera debería investigarse a las autoridades que gobernaban cuando el capo dominó la plaza de Guadalajara, ya que la administración que encabeza Aristóteles Sandoval apenas tiene cinco meses en funciones.

“No sé si tuviera protección de parte de la autoridad o si había cámaras, porque nosotros no tenemos cámaras en esta zona”, comentó.

“Somos una Administración que tiene cinco meses en la administración pública y usted está hablando de un grupo que tiene 15 o 20 años instalado en este estado, entonces hay que referir allí responsabilidades, si las hay, a quien le correspondan”.

Antes de asumir como secretario de Seguridad Ciudadana de Guadalajara, Sepúlveda Enríquez ejerció, entre otros cargos, la jefatura del Departamento de Seguridad Pública del Estado, durante el sexenio de Guillermo Cosío Vidaurri, de 1989 a 1995.