Tras la histórica elección del Papa León XIV el 8 de mayo de 2025, muchos fieles y curiosos se han preguntado no solo por su ideología y perfil pastoral, sino también por un tema muy terrenal: ¿cuánto gana el Papa?
La respuesta corta es sorprendente para muchos: el Papa no recibe salario, ni de la Santa Sede ni de ninguna diócesis. Sin embargo, eso no significa que viva sin recursos. Aquí te explicamos cómo funciona el sostenimiento económico del jefe del Estado Vaticano.
¿El Papa tiene sueldo?
El Vaticano ha sido claro en varias ocasiones: el Papa no percibe un sueldo como tal, aunque todos sus gastos están completamente cubiertos por el Estado Pontificio. Esto se confirmó incluso durante el pontificado de Benedicto XVI, cuando el entonces portavoz del Vaticano, Federico Lombardi, declaró que “el Papa no tiene salario”.
En el caso de Francisco, él mismo dijo públicamente que no cobraba un sueldo por su labor, y que vivía en una residencia más sencilla dentro del Vaticano para mantener su estilo austero. Todo indica que el Papa León XIV mantendrá este mismo esquema, tanto por tradición como por convicción personal.
¿Quién cubre los gastos del Papa?
Aunque no recibe salario, el Papa no paga renta, comida, transporte ni servicios médicos. Todos estos aspectos son financiados por el Vaticano a través de los ingresos que obtiene como Estado independiente, que incluyen:
- Aportaciones de fieles (el Óbolo de San Pedro)
- Inversiones financieras
- Ingresos turísticos y venta de productos oficiales
- Donaciones privadas
Además, como jefe de Estado, el Papa cuenta con seguridad, servicio doméstico, cocineros, chóferes y asesores, todo cubierto por el presupuesto vaticano.
¿Los antiguos Papas tenían un sueldo?
Históricamente, los papas tenían acceso a la vasta riqueza de los Estados Pontificios, pero eso cambió radicalmente tras la pérdida de esos territorios en el siglo XIX. Desde entonces, el Vaticano ha buscado un modelo más discreto y transparente.
Con León XIV, agustino y exobispo en Perú, todo indica que seguirá la línea de vida sencilla y enfoque pastoral, sin grandes lujos. Su experiencia misionera en América Latina y su cercanía con el Papa Francisco lo ubican en la misma línea de humildad económica.
¿Y si deja de ser Papa?
En el caso de una eventual renuncia, como sucedió con Benedicto XVI, el Papa emérito sí puede recibir una pensión vitalicia y seguir contando con los recursos del Vaticano, incluyendo vivienda y atención médica.
El Papa León XIV no recibirá un sueldo mensual, pero estará completamente cubierto por el aparato económico del Vaticano. Su vida estará dedicada al servicio, y sus necesidades estarán resueltas sin que implique un salario en el sentido tradicional.