Robert Francis Prevost, ahora conocido como el Papa León XIV, mantuvo una relación estrecha y de confianza con el Papa Francisco, quien desempeñó un papel crucial en su ascenso dentro de la Iglesia Católica.
Nacido el 14 de septiembre de 1955 en Chicago, Illinois, Prevost creció en el suburbio de Dolton. Su familia era activa en la parroquia de St. Mary of the Assumption, donde participaban como músicos, monaguillos y voluntarios.
Esta formación religiosa temprana influyó en su vocación sacerdotal de acuerdo con el Chicago Sun-Times.
Prevost ingresó a la Orden de San Agustín en 1977 y profesó sus votos solemnes en 1981 y fue ordenado sacerdote en 1982, cuando Juan Pablo Segundo era la cabeza del Vaticano.
Estudió en la Universidad de Villanova y obtuvo un doctorado en Derecho Canónico en la Pontificia Universidad de Santo Tomás de Aquino en Roma.
Su carrera incluyó una extensa labor misionera en Perú, donde fue obispo de Chiclayo y prefecto del Dicasterio para los Obispos en el Vaticano, estos dos cargos fueron impulsados por el Papa Francisco dentro de la jerarquía eclesiástica.
Robert Francis Prevost compartía con el Papa Francisco una visión pastoral centrada la atención a las periferias, la inclusión y la sinodalidad, que es un concepto central en la Iglesia católica de una participación activa de todos los fieles (laicos, religiosos, sacerdotes y obispos) en la vida, misión y decisiones de la Iglesia.
Obispo de Chiclayo (2015):
En 2014, Francisco nombró a Robert Francis Prevost como administrador apostólico de la diócesis de Chiclayo en Perú, y en 2015 lo designó oficialmente como obispo de esa diócesis.
Prefecto del Dicasterio para los Obispos (2023)
Ocho años después, en enero de 2023, Francisco lo nombró prefecto del Dicasterio para los Obispos, una de las posiciones más influyentes en la Curia Romana, encargada de asesorar al Papa en la selección de nuevos obispos.
Durante su gestión como prefecto del Dicasterio para los Obispos, Prevost implementó reformas significativas, como la inclusión de mujeres en el proceso de selección de obispos, reflejando el impulso reformista del Papa Francisco.
Cardenal (septiembre de 2023):
Ese mismo año, el Papa Francisco lo elevó al cardenalato, consolidando su rol como una de las figuras clave de la Iglesia.