El Gobierno del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, frenó las redadas antimigrantes ante su aparente preocupación por la creciente impopularidad de estos métodos.
De acuerdo con el diario The New York Times, según un correo electrónico al que tuvo acceso y la confirmación de funcionarios estadounidenses, Trump ordenó al Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE, por sus siglas en inglés) que pause las redadas en el campo y la hostelería, luego de que dichos sectores se vieran afectados al quedarse sin trabajadores.
La portavoz del Departamento de Seguridad Nacional, Tricia McLaughlin, confirmó en un comunicado que “se obedecerán las instrucciones del presidente” y que la cartera seguirá “trabajando para sacar de las calles de Estados Unidos a los peores delincuentes extranjeros ilegales”.
- 4 mil 700 marines se han desplegado en Los Ángeles
El jueves, a través de su red social Truth Social, el republicano reconoció que las operaciones llevadas a cabo en los últimos días por los agentes de migración han sido tan intensas que han dejado a los sectores del campo, la hostelería y el ocio sin trabajadores.
“Nuestros grandes agricultores y las personas que trabajan en el sector hotelero y del ocio han estado afirmando que nuestra política de inmigración tan agresiva les está quitando muy buenos trabajadores con mucha antigüedad, y que esos puestos de trabajo son casi imposibles de reemplazar”, señaló.
El mandatario agregó que “en muchos casos, los delincuentes a los que se les ha permitido entrar en nuestro país gracias a la estúpida política de fronteras abiertas de Biden, están solicitando esos puestos de trabajo. Esto no es bueno. Debemos proteger a nuestros agricultores pero sacar a los delincuentes de los Estados Unidos. ¡Se avecinan cambios!”.
El cambio en la política llega después de que más de una semana de manifestaciones masivas en Los Ángeles, California, y que se han extendido a otras ciudades de ese país.
Según el diario, la decisión apunta a que las redadas y arrestos a discreción en busca de deportar migrantes a gran escala estaría perjudicando también a circunscripciones electorales cuyo apoyo Trump quiere conservar rumbo a las elecciones legislativas del año próximo.
Las nuevas instrucciones se transmitieron a través de un correo electrónico enviado el jueves, donde se solicita al ICE “se suspendan todas las investigaciones/operaciones de cumplimiento de la ley en centros de trabajo en el sector de agricultura (incluyendo acuicultura y plantas empacadoras de carne), restaurantes y hoteles”.
Después de una semana de protestas por las redadas, unos 200 marines se trasladaron a Los Ángeles, Estados Unidos, para proteger propiedades y personal federal, informó ayer un comandante militar.
El mayor general Scott Sherman, comandante de la Fuerza Operativa 51, que supervisa el despliegue de cuatro mil 700 efectivos, dijo que los marines han completado su entrenamiento en disturbios civiles y el primer grupo se trasladó a un edificio federal al oeste del centro de Los Ángeles, donde comenzarán sus operaciones al mediodía, hora local.