Aliados se apartan de Israel luego de ofensiva en Rafah

El desafío de lanzar una ofensiva terrestre en Rafah distanció a Israel de sus aliados, que tratan de frenar la estrategia militar en Gaza ante posibles consecuencias por irrumpir cerca de la frontera de Egipto, donde su ejército rescató a dos rehenes en la primera extracción tras la guerra.

Mientras el primer ministro, Benjamin Netanyahu, presumió una “ejecución perfecta” en la que sus Fuerzas de Defensa (FDI) recuperaron a dos argentinos, la Unión Europea (UE) y Estados Unidos evidenciaron fracturas al rechazar el operativo que costó 74 vidas civiles. Ahora van por reducir esa intensidad al quitarle a Tel Aviv el acceso a armas o material para reparar cazas F-35 y ya lideran negociaciones alternas para un cese el fuego en un conflicto que ese Gobierno prolonga al rechazar las condiciones de Hamas.

Horas después de que Fernando Marman y Luis Har se reencontraran con sus familias tras 129 días de vivir condiciones extremas, el jefe diplomático europeo, Josep Borrell, sugirió no dotar de material bélico al ejército.

Al tachar de “desproporcionada” la ofensiva nocturna en la zona que alberga a 1.3 millones de refugiados, aseveró que no bastan las palabras e instó a Washington a restringir equipo para evitar que el saldo de víctimas escale, pues en Gaza se acercan a los 29 mil fallecidos. Y envió un fuerte mensaje a Netanyahu por su plan de reubicar a esas víctimas al cuestionar le a dónde los enviará “¿a la luna?” con tal de seguir la ruta bélica.

De inmediato la propuesta fue secundada por un miembro de la UE al frenar el envío de piezas previstas para reacondicionar aeronaves de combate.

Según información de Associated Press un tribunal de Países Bajos —sede de La Haya— dictaminó cesar por siete días las exportaciones militares a la nación que prometió acabar con la resistencia islámica. Y es que temen ser arrastrados a una escalada, pues las FDI podrían usar esos aviones para cometer graves violaciones internacionales, como la masacre de ayer según denuncias de los terroristas y la Autoridad Palestina, pues varias naciones monitorean a Tel Aviv, ante el riesgo de que actúe por propia cuenta al ignorar los llamados de Egipto, principal mediador, y de las potencias.

Pero las críticas no cesaron ahí, pues el presidente estadounidense, Joe Biden, hizo evidente su enojo por la decisión de Netanyahu al tacharlo de “imbécil”.

Según una filtración de la cadena NBC News el Ejecutivo dejó en claro en una conversación telefónica que no respaldará la invasión al admitir que el premier está encaminado a incendiar el conflicto.

También se dijo que quien pidió priorizar la seguridad de inocentes se siente frustrado por las acciones de éste, pues pese a múltiples acercamientos junto a Qatar y Francia se resiste a un acuerdo con el grupo que aún tiene cautivos a 134 personas, según un reporte actualizado del vocero de las FDI, Daniel Hagari.

Pero ni esas críticas hacen cambiar a Israel, que no desiste de la ofensiva. Su ministro de Defensa, Yoav Gallant, adelantó que hay más operativos en puerta al minimizar las pérdidas de ayer, mientras Netanyahu se declaró orgulloso de sus tropas por el éxito, pese a la ligera brecha entre la victoria y el desastre, según un mensaje en su cuenta de X.

Por separado, diarios israelíes reportaron tres bajas de soldados, mientras que el enemigo, a través de las brigadas Al-Qassam, afirmó que las FDI provocaron la muerte de tres rehenes, versión que negó Israel al declarar que Hamas sólo genera temor entre las familias que esperan que mujeres, niños y ancianos vuelvan pronto.

Pese a la postura militar, líderes israelíes reconocieron que las próximas liberaciones no serán como la de Rafah, pues ahora dependen de los diálogos, hecho por el que una delegación viajó a El Cairo para escuchar propuestas, mientras medios difundieron videos del rescate en el que las tropas resaltaron “es genial tenerlos con nosotros”, mientras imágenes satelitales mostraron que respondieron al fuego de milicias islámicas.

Por separado, Hagari respaldó a Netanyahu al referir que a más de cuatro meses de la masacre lo hecho muestra “la importancia de nuestra operación terrestre en Gaza, incluyendo Rafah”.

Pero EU sigue su propia ruta al declarar junto a Jordania que la vía para acabar con el conflicto es un alto el fuego de al menos seis semanas para liberar a más víctimas y sentar las bases para una paz duradera frente a una nueva catástrofe, según un mensaje del rey Abdalá II, quien se comprometió a implementar acciones para detener la invasión.