Nueva York prohíbe venta de crema batida en lata a menores de 21 años para evitar que inhalen óxido de nitrógeno

Establecimientos comerciales en Nueva York, Estados Unidos, tienen prohibido vender crema batida a menores de edad para evitar que estas lleguen a adolescentes, quienes inhalan el óxido nitroso que contienen.

De acuerdo con una polémica regulación, todos los jóvenes menores de 21 años tienen prohibido comprar crema batida en latada desde noviembre de 2021.

De acuerdo a la Administración de Control de Drogas (DEA, por sus siglas en inglés) uno de cada cinco jóvenes cae en el uso de inhalantes cuando llegan al octavo grado.

Y es que algunas personas usan el óxido de nitrógeno, también conocido como “gas de la risa”, como una droga recreativa por los efectos eufóricos, relajantes y disociativos que produce.

“La necesidad de limitar el acceso y la venta de "whippits" se hizo evidente por primera vez después de recibir quejas de los electores sobre botes vacíos en las calles de los vecindarios. Los whippits usados que se acumulan en nuestras comunidades no solo son un dolor de ojos, sino que también indican un problema significativo de abuso de óxido nitroso”, expresó Joseph Addabbo, senador del estado de Nueva York, al momento mostrar su respaldo a la ley.

Efectos del abuso del óxido de nitrógeno

Aunque el óxido de nitrógeno es un químico legal de uso profesional, puede ocasionar la muerte si se utiliza de forma incorrecta, pues llega a causar daño a las partes del cerebro que controlan el pensamiento, el movimiento, la visión y la audición, según ha reportado el Departamento de Control de Drogas de EU.

El elemento es un anestésico disociativo que puede inhalarse mediante la descarga de cartuchos y produce una euforia de corta duración.

Además, puede ocasionar desmayos, pérdida de presión arterial o ataques al corazón. Los efectos a largo plazo incluyen la pérdida de memoria y psicosis

Polémica por la venta de crema batida en NY

La polémica por la restricción en la venta de crema batida en Nueva York, comenzó porque muchas personas no estaban al tanto de la regulación que surgió tras la preocupación de que jóvenes utilizan las latas para drogarse.

Además, las multas por la venta de este producto a los menores se fijó en 250 dólares, monto que se eleva si la práctica se repite.

LRL