Nuevos sismos pegan en zona ya devastada

Tres personas fallecieron en Turquía luego de un nuevo doble golpe con terremotos de magnitud 6.4 y 5.8 que remecieron a la provincia de Hatay en un lapso de escasos tres minutos, cifra de víctimas que se suma a los 47 mil en esa región y en Siria.

Al igual que hace dos semanas, el movimiento alcanzó al país vecino, pero con un menor impacto, al registrar sólo seis heridos en Alepo por la caída de escombros y paredes de edificios ya dañados por los sismos previos, según la agencia estatal SANA; mientras que el gobierno de Recep Tayyip Erdogan informó que hubo 213, quienes fueron trasladados a hospitales por varias lesiones, de las que no se dieron detalles, y detalló que los decesos ocurrieron en Antakya, Defne y Samandag.

Y la población admitió que revivió los hechos del pasado 6 de febrero al no poder sostenerse ante el impacto.

De acuerdo con la Autoridad de Gestión de Desastres y Emergencias turca (AFAD) el segundo movimiento fue una de las más de 30 réplicas en poco más de tres horas, según su última actualización hasta el cierre de esta edición y junto al ministro del Interior, Suleyman Soylu, confirmó que un día después de suspender las labores de búsqueda y rescate éstas se reactivaron al confirmar que en varias provincias nuevamente hay gente bajo los escombros.

Ahora buscan sacar a éstas de inmuebles colapsados, principalmente en puntos de Hatay, por lo que equipos de rescate y mineros ya escanean zonas críticas en busca de víctimas, luego de recibir llamadas de auxilio, mientras algunas regiones perdieron nuevamente la energía eléctrica.

Aparentemente la crisis es significativamente menor que hace unos días, pues se prevé que hay menos de una decena de atrapados en tres edificios que se vinieron abajo; pero el alcalde de Hatay, Lutfu Savas, alertó que podría haber más sepultados entre los escombros y, en consecuencia, más pérdidas de vidas, ante la sombra de más y más réplicas.

Este nuevo golpe ocurre cuando el régimen de Erdogan se preparaba para la evaluación total de daños y su respectiva reconstrucción, pero la zona se vio envuelta en una nueva tragedia que incluso generó alertas por un posible tsunami que asedió las costas de la región, pero que poco después se retiró; además, la sacudida cimbró a 10 provincias turcas, pero también llegó a otras naciones como Chipre, Egipto, Irak, Israel, Líbano y Palestina, que reportaron que sintieron los estragos.

Y es que en las últimas horas se reportaron nuevos daños estructurales tras la revisión en los últimos días de 800 mil inmuebles, según datos oficiales. Medios turcos como Daily Sabah informaron que un puente se partió por la mitad, varios edificios terminaron por caerse tras los daños recientes en Samandag y además dos hospitales fueron evacuados en Inskenderun por temor a futuras sacudidas, lo que obligó a trasladar de inmediato de pacientes de Cuidados Intensivos.

En tanto, decenas más que no requieren atención urgente son atendidas en plena calle en clínicas improvisadas en carpas ante el miedo de que nuevas réplicas —que un día antes ya rebasaban las seis mil— provoquen el derribo de más inmuebles, por lo que reportan 1.6 millones de ciudadanos alojados en refugios sólo en Turquía.

En tanto, en Siria continúan las evaluaciones de esta otra emergencia con varios edificios que se derrumbaron después de quedar prácticamente inhabitables desde hace unos días, de acuerdo con los Cascos Blancos, por lo que decenas de residentes dormirán nuevamente a la intemperie, evidenciando la devastación en menos de un mes.