En el primer día de la invasión en Cherníhiv/Chernígov, principal ciudad al este de Chernobyl las tropas rusas tomaron el control de la Zona de Exclusión y del complejo nuclear de Chernobyl, aun cuando los dos bandos confirmaban la ocupación cada uno hablaba de manera diferente de cómo ocurrieron los hechos. Recientemente, el organismo regulador de la energía atómica de Ucrania anunció que tras la toma de la central los operarios del complejo seguían en sus puestos y que las instalaciones no habían sufrido daños. Toda la información existente en la actualidad sobre el sitio asegura que las instalaciones se encuentran en perfecto estado y no han sufrido ningún daño; sin embargo, horas después de la invasión en Chernobyl varios de los sensores automáticos de radiación registraron aumentos significativos en sus mediciones. El incremento que se registró de radiación se asocia al paso de un elevado número de vehículos pesados por la zona en dirección a Kiev, lo que habría ocasionado que gran cantidad de polvo se levantara y se movilizaran algunas partículas radiactivas del suelo. Las autoridades han señalado que este aumento se mantiene muy por debajo de los límites considerados peligrosos para la salud.

Gráficos Ismael F. Mira, Roberto Alvarado y Luisa Ortega

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