Se tambalea mando en la defensiva ucraniana

A punto de cumplir un año en guerra, la respuesta defensiva en Ucrania parece fracturarse a nivel interno, pues se filtró que el presidente Volodimir Zelenski planea remover al líder de las Fuerzas Armadas, Oleksi Reznikov, en plena intensificación por la que anticipan uno de los mayores ataques en semanas.

Sin revelar un motivo, el diario Ukrainska Pravda indicó que es cuestión de días para que el gobierno anuncie el cambio en el mando que encabezó la lucha contra el invasor desde el pasado 24 de febrero, lo que expone una sacudida en el gabinete, pues de acuerdo con las fuentes de ese medio su reemplazo sería alguien que forma parte del gabinete.

En medio de las especulaciones, mientras Kiev redobla la presión a Occidente para conseguir aviones de combate, funcionarios desmintieron los señalamientos y el aludido aseveró que sigue como líder y acatará cualquier decisión, aunque, de momento, no ha recibido ninguna notificación.

Reznikov, quien ha sido clave en la ayuda de aliados de Occidente, intentó apagar las advertencias al detallar que su mira sigue puesta en la victoria contra Moscú como líder de la respuesta militar para sacar a los ocupantes de su territorio en defensa de la soberanía nacional, al tiempo que sus tropas se refuerzan ante el riesgo de que escale el conflicto en el aniversario. Por ello, se alistan en puntos clave como cerca de territorios perdidos a manos del Kremlin, como Soledar en el Donbás, y en algunas zonas fronterizas y costeras, como Járkov que ayer fue blanco de una fuerte ofensiva aérea que dejó al menos cinco heridos, de acuerdo con mandos regionales.

Sin embargo, ante la insistencia de la prensa sobre qué opina de la inminente remoción, el líder del ejército de 56 años declaró que el objetivo es acabar con la guerra y aceptará cualquier decisión de Zelenski, como comandante en jefe supremo de Ucrania, pues él decide quién permanece y quién se va.

Añadió que desde que se llega a un alto cargo sabe o “debe darse cuenta que no está en su puesto de por vida”, pues así como empieza su etapa en el gobierno ésta puede terminar, en referencia a que cada posición es de suma importancia para la resistencia ucraniana, a casi 350 días de que estallara el conflicto por el que el Kremlin intentó arrebatarles cuatro ciudades al anexárselas en un falso referéndum.

Al respecto, el mismo diario precisó que hay probabilidades de que Reznikov siga cerca de Zelenski, pero ahora a cargo de otro ministerio. Con ello, apuntan a que cedería la batuta de la Defensa a Kirilo Budanov, el jefe de la agencia de inteligencia ucraniana, de acuerdo con sus fuentes; pero no hubo confirmación oficial sobre estas modificaciones y tampoco habló quien ya es colocado en el radar de posibles sucesores por el manejo de las tropas desde el año pasado.

Sin embargo, dicho escenario desató dudas sobre si los ajustes responden al escándalo de corrupción en el país, mismo que alcanzó a fuerzas militares por la presunta compra a sobreprecio de alimentos, equipo y hasta uniformes para los combatientes; no obstante, será hasta que se decida si sale del gobierno o es reubicado lo que dará luces sobre un supuesto vínculo con uno de los flagelos que más ha sufrido Zelenski desde que llegó al gobierno, mucho antes de la escalada rusa.

En torno a la situación en el campo de batalla, mandos señalaron que sus fuerzas se preparan en todas las posiciones de cara al 24 de febrero, cuando el enemigo podría lanzar una severa oleada, quizá peor que las sufridas en Kiev.

Aunque no hay información sobre cuáles podrían ser los nuevos blancos o zonas de riesgo, se especula que los rivales tratarán de atacar de manera simultánea el este para adentrarse en el territorio que Rusia se atribuye como suyo, mientras que los rivales acusaron que Ucrania ataca sus propios hospitales para culpar a ese régimen de posibles bajas.