Visita de Kim a Putin eleva vigilancia global

Gobiernos mundo siguen pendientes del lazo entre los regímenes de Norcorea y Rusia ante el temor de que el primero arme a los invasores contra Ucrania.

Pese a que Occidente pronosticaba que la reunión ocurriera ayer, agencias rusas sólo informaron al cierre de esta edición que ambos ya se encontraban en Vostochni, aumentando la tensión al jugar con la atención de sus rivales.

Mientras que el vocero del Kremlin, Dmitri Peskov, adelantó que una comida especial se dará hasta concluir el Foro Económico en Vladivostok.

Ante la falta de fotos de los líderes juntos, pues sólo se observó al visitante al llegar a Khasan, medios asiáticos anticipan que hoy dialogarán sobre el suministro de misiles y artillería ante un evidente agotamiento de reservas para atacar a las fuerzas de Volodimir Zelenski, mientras que Kim buscaría cooperación militar, suministros energéticos y alimentarios.

Sin embargo, Pyongyang evitó hablar de un acuerdo ante múltiples advertencias de aliados de Kiev si viola normas del Consejo de Seguridad de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), tema en el que Francia aseveró que esta alianza expone el aislamiento del Kremlin por la guerra, que lo forzó a buscar a Norcorea, nación también contenida por Occidente.

Además, el invitado expuso que el objetivo de su líder es potenciar la relación bilateral con su socio estratégico, de acuerdo con informes de la Agencia Central de Noticias de ese país. Postura que replicaron medios rusos al sostener que Jong-un estableció que su viaje es una “clara manifestación” de la importancia del lazo entre Pyongyang y Moscú.

Y, pese a la incertidumbre sobre los objetivos y la fecha de este polémico encuentro, el gobierno de Corea del Sur instó a Moscú a actuar “responsablemente”, en su intento por detener un posible envío de armas, sin respuesta.

En tanto, este viaje no evitó los avances armamentísticos de Norcorea que en plena visita a Rusia lanzó dos misiles al mar del Este, según un informe del ejército de Seúl, a casi dos semanas de su última advertencia contra la alianza entre Corea del Sur y Estados Unidos.