Día del Niño: 5 hábitos financieros para los más pequeños de la casa

El ahorro y la correcta administración de las finanzas son hábitos que se pueden aprender desde pequeños y que pueden tener un impacto positivo durante la vida adulta. Por esto, este Día del Niño puede ser una buena oportunidad para poner en práctica algunos de estos ejercicios.

Al respecto, Iván Hernández, CoFounder & Head of Product de Coru, plataforma de finanzas personales, dijo que “como padres hay que tomar conciencia y fomentar que nuestras hijas e hijos no desarrollen malos hábitos de consumo. Es importante enseñarles los conceptos básicos de finanzas personales”. 

De acuerdo con cifras de la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef), seis de cada 10 adultos no lleva un registro de sus gastos mensuales y 44 por ciento de los ahorradores lo hacen a través de mecanismos informales.

Por ello, aquí se enlistan algunos consejos para que este Día del Niño también sea una oportunidad de acercar a los menores a la educación financiera. 

DÍA DEL NIÑO CON APRENDIZAJES FINANCIEROS

1.- Establecer metas de ahorro

Cuando los niños buscan comprar algún dulce o juguete se puede hablar de una meta. Aquí, los padres pueden enseñarle al menos que si ahorra lo puede conseguir.

Esta práctica ayudará a que las niñas y los niños puedan valorar lo que significa luchar por alcanzar un objetivo.

2.- Ahorrar en el banco

Las niñas y niños usualmente comienzan a ahorrar sus ‘domingos’ en una alcancía. Pero se puede iniciar la familiarización con los bancos al abrir una cuenta infantil.

3.- Buenos hábitos de consumo

 Ir al supermercado o a la tienda es un buen momento para enseñarles buenos hábitos a los niños: desde hacer una lista con las cosas que necesitan en la casa, hasta saber diferenciar las ofertas y cuándo convienen.

4.- Deudas y préstamos

Aunque pueda parecer duro, es importante que los padres se manejen como un banco; es decir, evitar dar concesiones para que las niñas y los niños puedan aprender a que es mejor ahorrar, aunque tarden más tiempo en alcanzar su objetivo, que pedir prestado.

5.- Hacer un presupuesto.

 Una vez que los niños fijen sus ojos en un objetivo, se les puede enseñar a hacer un presupuesto. No es necesario que ahorren toda su mesada para destinarla a un fin, sino que pueden gastar una parte y destinar otra al ahorro.