Carlos Urdiales
Con los terremotos de 1985 permeó en el imaginario social que el gobierno actuaba sin prontitud y tino. La capital del país rota, hizo que buena parte de la sociedad se mostrara como somos: solidarios, capaces, fraternos. Muy pocos en ese entonces fueron testigos de lo que al interior del gabinete ocurría: órdenes y acciones que desde Los Pinos, se instrumentaron con la lógica y eficacia posibles. Poca transparencia y nada de IFAI.
La historia valida que los terremotos despertaron a la sociedad civil, a colectivos fundamentalmente urbanos que no esperaron pasivamente, que rebasaron en la catástrofe al gobierno (torpe ayer y hoy, por definición). Se selló esa narrativa. ¿Completamente falsa o completamente verdadera? Da igual. El papel de la radio en particular y de los medios de comunicación en general, fue primordial.
Los noticiarios de radio cobraron protagonismo y trascendencia. Allá comenzó a marcar el paso José Gutiérrez Vivó con su “Monitor” en Radio Red, empresa de Clemente Serna que en 1994 vendería a la familia Aguirre, de Radio Centro, con toda la oposición del comunicador estrella que antes, había sido ejecutivo de ventas de la radiodifusora y que un día entró de emergente al micrófono sin imaginar, lo mucho que haría.
Al tiempo, los temores de Gutiérrez respecto a los Aguirre se materializaron. En febrero de 2004 lo sacaron del aire sin conferencias ni desplegados de por medio, lo “apagaron”. No había internet ni activismo de red social, ni firmas virtuales por millares (igual que amigos imaginarios). Hubo mantas y alguna protesta frente al edificio de Radio Centro; poco más.
Gutiérrez Vivó encontró refugio firmando un convenio de negocios con MVS en marzo de 2004. Los costos del exitoso concepto radiofónico le restaron viabilidad. No hubo mecanismo comercial para sostenerlo. La compra de El Heraldo, luego Diario Monitor, empeoró la historia.
Pocos quieren mirar lo que el comunicador, quien además de autos clásicos coleccionaba atributos socialmente atractivos como: valiente, demócrata, libre y azote de corruptos, aplicó a sus empleados. Notas y coberturas dobles para radio y periódico por el mismo sueldo y al final, la huida sin responder por salarios no pagados a propios y extraños. Se fue encubierto bajo el manto legitimador de López Obrador y acusó, sin aportar pruebas, a Fox. Teorías de complot.
Surgía “Para Empezar” en Stereo Rey (hoy MVS) con Pedro Ferriz de Con, Adriana Pérez Cañedo y Víctor Calderón Jacobs (qepd), más tarde con Carmen Aristegui y Javier Solórzano, que luego irían como periodistas-empresarios a Imagen, al lado del prominente Alfonso Romo, de Grupo Pulsar. La armonía entre los socios se rompió con feas maneras y sin desplegados ni conferencias, pero con demandas en tribunales mercantiles. Ferriz de Con continuó hasta agosto de 2014 con el negocio en Imagen, ya de la familia Vázquez.
Estéreo Cien iniciaba “Enfoque Financiero” con José Cárdenas que después marcó pauta en Grupo Acir con “Panorama Informativo” y a quien despidieron en 1996 por un audio transmitido en vivo desde Guerrero, cuando surgió el EPR. No había Internet ni redes sociales. Luego y hasta hoy, Cárdenas lidera la tarde desde Grupo Fórmula y encabeza Uno TV, de Grupo Carso.
Los noticiarios radiofónicos se volvieron protagonistas sociales y buen negocio también, con muchas historias.
En 2003 Televisa Radio comienza a ser manejada por Grupo Prisa. Cuando Carlos Loret de Mola se va a las mañanas del Canal 2 (2004), Carmen Aristegui se hace cargo de la primera emisión de “Hoy por Hoy”. Comienza el ascenso sustentado no tanto en grandes recursos económicos como en la libertad editorial; misma que en 2006 fuera cuestionada. La XEW alineada con un candidato fue estigma, pero no obstáculo.
En 2008 Prisa no renovó el contrato con Carmen. Protestas y rencores sellaron el episodio. En 2009 MVS la contrató. En 2011 hubo despido, ultimatos, más conferencias y regresó. Hoy ya no.
Si la demanda legal que Aristegui presentará contra MVS por los motivos advertidos ocurre en tribunales laborales, se habrá sellado el origen y destino del asunto. En 30 años, la sociedad, los medios y los comunicadores han cambiado. El régimen de concesión del Estado, modelo de negocio e intereses empresariales de todos los involucrados, no.
urdiales@prodigy.net.mx
Twitter: @CarlosUrdiales
