Woody Guthrie es autor de una canción llamada This land is your land (“Esta tierra es tu tierra”). La composición es un clásico de la música de protesta de Estados Unidos. El trovador compuso la pieza en 1940 y la grabó en 1944.
La canción se hizo famosa años después, cuando fue interpretada por cantantes famosos como Joan Báez. En momentos como los actuales, en los que una vez más el gobierno y los poderes políticos y económicos de Estados Unidos están expulsando a miles de personas cuyo único delito es no tener papeles y ser de una raza considerada como inferior, la obra de Guthrie vuelve a adquirir relevancia.
Lo que dice Guthrie en su canción es que la enorme tierra de América del Norte, desde el Pacífico hasta el Atlántico, fue hecha para todos, para ti (quien quiera que tú seas) y para mí (quien quiera que yo sea). En otras palabras, América del Norte pertenece a todos: a los blancos, los negros, a los mexicanos, a los nativos americanos. Como diría Emiliano Zapata, “la tierra americana es de todos los que la trabajan”, de los que construyen sus casas sobre sus llanuras, de los que conviven en sus valles. Lo que nos canta Guthrie es una hermosa utopía americana que sigue siendo defendida por muchos estadounidenses honrados cuyas voces aún no han sido silenciadas.
This land is your land se inspira en las experiencias de la vida de Guthrie. El músico nació en 1912 en Oklahoma. Muy pronto se vio obligado a emigrar a Texas para sostener a su familia. La sequía y la crisis económica lo llevaron hasta California, donde sobrevivió haciendo trabajos de todo tipo y conoció la dura realidad de los trabajadores agrícolas de origen mexicano. Hay dos canciones de Guthrie en las que él habla de la tragedia de los migrantes mexicanos, que después de ser explotados en los campos de cultivo son tratados como desechos humanos: Deportee (Plane Wreck at Los Gatos) y Pastures of Plenty. En California, Guthrie comenzó su carrera musical y posteriormente viajó a Nueva York, donde murió en 1967. Militó en sindicatos y organizaciones políticas socialistas. Quizá por ello su nombre no sea tan recordado como el de uno de sus seguidores más famosos: Bob Dylan.
A diferencia de lo que afirma Guthrie en su hermoso himno, Donald Trump les dice a millones de habitantes de los Estados Unidos que ésa no es su tierra, que esa tierra es propiedad de unos pocos. Sus supuestos dueños son quienes tienen el poder, tienen las armas, dictan las leyes. La historia de los Estados Unidos ha sido una historia de despojos y exilios. Sin embargo, no todos los estadounidenses piensan igual que Trump. Es a ellos a quienes debemos buscar.