En el Día de la Marina cabe mencionar que el Gobierno federal publicó en el Diario Oficial de la Federación, el 30 de septiembre de 2024, la Política Nacional Marítima, una propuesta estratégica de una Política de Estado, que articula y proyecta el Poder Nacional, el Poder Naval y el Poder Marítimo del Estado mexicano.
Asume el apotegma de que sin seguridad no hay desarrollo. Y establece un sistema nacional marítimo en donde los Intereses Marítimos Nacionales constituyen la columna vertebral de la Política Nacional Marítima.
México es un país marítimo. Tiene la gran oportunidad de desarrollar la sustentabilidad de una economía azul, como elemento natural y medio fundamental para consolidar sus intereses nacionales, para beneficio de la nación.
El desvisadero, nuevo capítulo
La ruta trazada, a partir de los Intereses Marítimos Nacionales articula demandas, necesidades y deseos que, junto a una conciencia marítima, sintetiza los esfuerzos productivos, individuales y colectivos de la sociedad y el gobierno.
Estos Intereses Marítimos Nacionales —seguridad marítima, sistema portuario nacional, protección marítima y portuaria, cultura marítima, industria naval, recursos naturales marinos, comercio marítimo, marina mercante, medio ambiente marino y turismo náutico— integran una constelación de elementos del desarrollo y la seguridad que se expresan en la política de Estado, con los respectivos diagnósticos, medios y fines para consolidar la Política Nacional Marítima.
La coordinación entre sociedad y gobierno, en las instancias federal, estatal y municipal de 17 entidades, con una voluntad política federal cuyas funciones de administración, coordinación y dirección recaen en la Secretaría de Marina-Armada de México, conllevan estrategias y acciones interinstitucionales, con las respectivas prospectivas, en un horizonte al año 2045, por lo que la Política Nacional Marítima se articula con otras políticas nacionales de 15 secretarías de Estado.
Una política de Estado asume un proceso de planeación estratégica que conduce al logro del Proyecto de Nación, con la sensibilidad política de la interdependencia compleja entre los Estados y los actores de un proceso de globalización, en donde los campos de su Poder Nacional —económico, político, social, militar, medioambiental, diplomático y tecnológico— participan de una competencia alta, en procesos de cooperación internacional, para mantener su estabilidad política y social y, a través del reflejo que el Poder Marítimo —como extensión del poder del estado por el tránsito, comunicaciones y comercio que aprovecha el mar como intercambio inter-Estatal- y el Poder Naval —garantía de que los recursos particulares sean del Estado y un mecanismo para extender y expresar el poder de las naciones—, logren para fortalecer el Poder Nacional y, así intervenir en la geopolítica del mundo global.
Así, la política de Estado en materia marítima y portuaria muestra sus alcances y límites en la misión, visión y objetivos de todos y cada uno de los intereses marítimos nacionales que conforman la Política Nacional Marítima, fortalecen la gobernabilidad y gobernanza, reafirmando la responsabilidad de los actores y comprendiendo los factores de todos los ámbitos de una estrategia marítima integral.
Felicidades a mujeres y hombres de mar en este Día de la Marina, bienvenida la Política Nacional Marítima, como política de Estado.
