Las crisis se repiten

La historia se repite y las crisis financieras y de salud son cíclicas. Pero también se puede mitigar el daño causado con decisiones contundentes, que muchas veces no son fáciles de tomar.

Entre 2007 y 2009 México pasó por una crisis económica y de salud importante por dos factores: la crisis financiera en Estados Unidos y el inicio del brote de la influenza AH1N1 en nuestro país.

Luego de que en 2007 se comenzó a resentir en la economía estadounidense la falta de liquidez provocada por la crisis inmobiliaria, en 2008 fueron dándose otros problemas, como una crisis alimentaria global, derrumbes bursátiles (como las crisis bursátiles de enero y de octubre), lo que generó, en conjunto, una crisis económica a escala internacional.

Los bancos centrales en Estados Unidos, Canadá y algunas partes de Europa tomaron la coordinación sin precedentes de un recorte de un medio punto por ciento de los tipos de interés en un esfuerzo para aliviar la crisis.

México logró sortear las crisis financieras de otros países en particular la de nuestro principal socio comercial, Estados Unidos.

Platicamos con Ernesto Cordero, entonces secretario de Desarrollo Social y poco después secretario de Hacienda para que nos contara cómo se trabajó en ese momento tan inestable del país.

Fueron años complicados, el Fondo Monetario Internacional reportó que los sistemas financieros de Europa, EU y Japón registraron entre 2007 y 2010 10.1 billones de dólares en pérdidas. A esto se sumó la crisis de la influenza, con los ojos del mundo y de organismos internacionales, como la Organización Mundial de la Salud (OMS), puestos en México.

ERNESTO CORDERO: En particular, te diría que la crisis de la influenza fue un momento muy difícil, donde hubo que tomar decisiones muy drásticas, que creo que fueron las correctas. Se demostró que México actuó con una gran responsabilidad y evitó por lo que hicimos en México que la epidemia de la influenza se convirtiera en algo más serio a nivel global, fue muy serio en México, pero no a nivel global.

Hoy estamos viendo con el coronavirus que estas cosas no se pueden ignorar, que no se puede pensar que no pasa nada, que nada más es una gripita, no, estas cosas son serias y a lo mejor no tienen una letalidad alarmante, pero estas cosas se dispersan por todo el mundo a una velocidad vertiginosa. Una enfermedad para la cual no hay vacuna y vas a tener un problema global como el que estamos lidiando ahorita en este momento.

BB: En ese momento con el tema de la influenza lo que se hizo fue cerrar prácticamente toda la actividad económica durante dos semanas. Una medida muy controvertida en su momento.

EC: Sí, y hay que recordar que también nosotros estuvimos bajo el escrutinio rigurosísimo de la OMS, México fue un poco como en China ahora con el Covid-19, el primer país donde se registraron o al menos se documentaron estos casos.

Los protocolos de actuación que establece la OMS, y conforme empezamos a ver que el problema se podía agravar en México, se tomaron medidas de este tipo. La única manera de controlar el crecimiento de una epidemia como ésta es limitar el contacto entre seres humanos, evitar saludarse de mano, el contagio tal como está, eso implica cerrar el comercio, cerrar escuelas, suspender actos públicos, me acuerdo que en ese momento se suspendió la Feria de Aguascalientes.

Pasajeros mantienen protección

[caption id="attachment_1122425" align="alignnone" width="696"] Mexicanos que regresan al país portan cubrebocas en el aeropuerto capitalino como medida de prevención ante el riesgo de que puedan contraer coronavirus. Foto: Cuartoscuro[/caption]

BB: ¿Con base en qué se tomaron esas decisiones?

EC: En el momento en que surge la información que había fallecimientos en México ocasionados por un virus desconocido, por una mutación de la influenza. No se sabía qué tan letal era, no se sabía qué tan contagioso era, y no estábamos en condiciones de hacer las pruebas en México.

Por las instrucciones del presidente (Felipe) Calderón, generamos un sistema de información confiable, montamos en cuestión de horas un laboratorio que pudiera hacer las pruebas en México, contamos con la ayuda de expertos canadienses y estadounidenses quienes generosamente vinieron a montarnos el laboratorio en México, compramos los aparatos aquí en México y en cuestión de 3 días pues ya se estaban haciendo las pruebas aquí en México, centralizamos todas las muestras de personas con sospecha de estar infectados con la AH1N1, hicimos las pruebas en México, pudimos de esa manera determinar que efectivamente todos los que se creían enfermos estaban enfermos o no, lo hicimos con una gran transparencia y sin ocultar información.

BB: ¿En este momento hay suficientes pruebas de laboratorio en México para poderse hacer para el coronavirus?

EC: Mira, yo creo que sí deberíamos preocuparnos, no lo digo yo, lo están diciendo en el mundo, pues México es un caso muy sospechoso, ¿no?, en México no hay coronavirus a pesar de que todas las condiciones están dadas para que hubiera como en el resto del mundo.

Por ejemplo, pasa en California, donde tienes un estado de emergencia, donde de verdad están tomando acciones decididas, tienen casos de coronavirus en California y no tienes ninguno en Tijuana, ni ninguno en Baja California, como que la frontera fuera milagrosa e impidiera que tuviéramos casos.

BB: Bueno, además de todo tienen una población hispana que está en constante flujo.

EC: Claro, hay un contacto brutal. Y luego hay otro dato de Bloomberg, hablaban que era muy raro como en Brasil y en México se detectaron más o menos en la misma fecha el primer caso y hasta el pasado 11 de marzo Brasil tenía 37 detectados con coronavirus y 867 posibles casos y en México había 9 y otros 37 sospechosos, o sea, no hay consistencia en lo que ha pasado en el resto del mundo con lo que está pasando en México; reportan, yo no sé qué tan confiables sean, que únicamente se han aplicado cerca de 272 tests de coronavirus en México.

BB: ¿Cómo se controló la crisis financiera de Estados Unidos en 2008, en una economía global, en donde se afectó a México?

EC: Sí, bueno, la crisis de 2008 se empieza a gestar por una burbuja en el mercado hipotecario estadounidense que empezaron a prestar créditos para compra de vivienda a personas que no tenían ingresos, que no tenían trabajo y luego estas hipotecas que claramente nunca iban a ser pagadas.

Empezaron a empaquetarlas junto con hipotecas que tenían una muy buena calidad crediticia, gente que sí iba a pagar el crédito de su casa, y se empezaron a bursatilizar y a vender de manera empaquetada.

Reventó el tema porque ese portafolio acabó contaminado, acabó siendo un mal portafolio y reventó esta burbuja, y bueno, los que eran dueños de ese papel claramente tenían un papel que estaba en bancarrota y se genera la crisis que se da a nivel mundial.

En México teníamos un sector hipotecario bastante sólido y un sistema financiero muy consolidado y afortunadamente no hubo canales de transmisión como en el resto del mundo. México sufrió una crisis importante, hay que recordar que, en 2009, motivo de la influenza, motivo de la crisis financiera, pues tuvimos una caída del PIB de cerca de 8.9 por ciento, entonces, claro que nos afectó.

México tenía una fortaleza económica que le permitió enfrentar esa crisis y no sólo enfrentarla, sino que salimos adelante, fuimos la economía que más rápido salió adelante de una crisis como ésta y en 2010 ya estábamos creciendo a 5.2 por ciento, ¿no? Cifra que hoy se antoja peor imposible de alcanzar, pero sí, en esa época crecíamos a 5.2 por ciento.

BB: Bank of America ha recortado su pronóstico de crecimiento a 0.5% para México en este 2020.

EC: Aquí hay algo muy importante, y es que si la autoridad hacendaria genera condiciones de fortaleza en finanzas públicas, presupuestos balanceados, fondos de estabilización, líneas de crédito convincentes; es decir,  reservas internacionales, que te ayudan a enfrentar una situación de éstas y que te ayudan, si no a evitarla, a enfrentarla de una manera más ordenada, eso es lo que te hacen todas estas cosas, pero esto no evita una crisis, no hay blindaje que exista, quien diga que estamos blindados o denota ignorancia o denota mala fe al decirlo, no es posible en una economía como la mexicana.