Tres lustros perdidos para mujeres y chance de 15% del PIB

¡Estoy agotada!… un lamento frecuente de múltiples mujeres que se ahoga dentro de una taza de café. Sus profundas ojeras escondidas tras kilos de maquillaje reflejan una triste realidad: la vanagloriada equidad, aún una utopía.

En el orbe cada vez más féminas se suman al mercado laboral. En los países de la OCDE la tasa de participación femenina ronda el 56%. Sin embargo, pese a su mayor presencia en oficinas y negocios, la distribución del tiempo para las labores del hogar simple y sencillamente no ha cambiado.

A la fecha, ellas son las principales responsables del cuidado de la casa y los niños, una situación que se ratificó con la llegada de la pandemia. Se calcula que las mujeres destinan 1.9 veces más horas a esos trabajos no remunerados.

A su vez, en México el rezago es mayor. De acuerdo con datos de la Encuesta Nacional sobre Uso del Tiempo, desarrollada por el Inegi, de Julio Santaella, aquí las damas destinan 31 horas a la semana al trabajo doméstico, el triple que los hombres, quienes en general aportan entre 11 y 12 horas, independientemente de que trabajen o no…

Quince años perdidos… En ese contexto, ayer el Imco, al mando de Valeria Moy, dio a conocer su investigación “#MujerEnLaEconomía” la cual analiza los beneficios de sumar a más mujeres al mercado laboral.

Hasta 2019, la tasa de participación económica de las mexicanas era de 45%, por debajo de sus pares en AL como Argentina donde la cifra asciende al 50.6%, Brasil 54% o Colombia 57.5%.

Por si fuera poco, la sobrecarga de trabajo derivada por la pandemia sacó a muchas de la carrera. En 2020 el porcentaje de mujeres económicamente activas retrocedió al 41%, nivel similar al de hace 15 años.

Hoy, por cada hombre que no tiene un trabajo remunerado por labores domésticas, hay 12 mujeres en esa situación.

Además, aunque algunas empresas otorgan beneficios a madres para realizar funciones de teletrabajo algunos días de la semana, no se ofrece la misma prestación a los hombres, lo que consolida los modelos de género actuales y acota las capacidades de las mujeres de avanzar en el escalafón profesional.

En el sector privado, aunque 35% de la plantilla laboral de las empresas que cotizan en la BMV son trabajadoras, sólo 1% de las direcciones generales están ocupadas por mujeres...

Mujer de oro… Más allá de la lastimosa injusticia, tener menos manos en sectores productivos limita el crecimiento del país.

Fátima Masse, directora de sociedad incluyente del Imco, resalta que si México logrará equiparar su nivel de participación femenina al del promedio de la OCDE, en los siguientes 10 años, el PIB podría experimentar un incremento real acumulado de 15%.

En otras palabras, sumar a 8.2 millones de féminas al mercado laboral, podría traducirse en una producción adicional de 3.5 billones de pesos hacia el 2030. Así que todo por ganar…