Argentina y el péndulo al lado opuesto

BAJO SOSPECHA

*Esta columna expresa el punto de vista de su autor, no necesariamente de La Razón.
*Esta columna expresa el punto de vista de su autor, no necesariamente de La Razón.
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Argentina ha cambiado de rumbo, el país se polarizó y el péndulo de la izquierda del kirchnerismo dio un vuelco total, al otro lado, el de la derecha más radical.

El cambio que llegó

Javier Milei celebra con su hermana, Karina Milei, su triunfo en la segunda vuelta, el pasado domingo, en la elección presidencial de Argentina.
Javier Milei celebra con su hermana, Karina Milei, su triunfo en la segunda vuelta, el pasado domingo, en la elección presidencial de Argentina.Foto: Especial

Javier Milei ganó las elecciones por quienes votaron en contra del kirchnerismo, que lleva más de 18 años en el poder, con acusaciones serias de corrupción y malos manejos económicos que han llevado al abismo la economía de ese país.

Hasta hace muy poco la figura de Javier Milei no era ni siquiera conocida. En un par de años de salir en distintos programas de televisión, en algunos de espectáculos, en otros como comentarista económico, saltó a la fama como político y llegó a ganar la presidencia.

El mismo partido que ha estado en el poder fortaleció la figura de Milei, pensando en que él no era la oposición y que dividiría el voto. Para muchos era un personaje excéntrico, que platicaba con sus perros, que tienen nombres de economistas, y uno de ellos, sí, de sus perros, era su consejero. Salía a hacer campaña con una motosierra diciendo  que iba a mochar el presupuesto y que acabaría con los programas sociales.

Pues con ese discurso ganó Milei, las encuestas fallaron. Hasta finales de la semana pasada, se hablaba de un empate técnico entre Milei y el candidato del oficialismo, Sergio Massa, quien había sido ministro de Economía.

Fue tan mala la presidencia de Alberto Fernández con Cristina Fernández de Kirchner, dejando al país con la mayor crisis económica y con pobreza en 40 por ciento de su población, que el voto que le dio la victoria de Milei fue el del hartazgo.

Milei, siendo un candidato de posiciones de ultraderecha, quien moderó su discurso en las últimas dos semanas previas a la elección, ganó por más de 10 puntos al candidato del oficialismo.

Parte de su triunfo es por las divisiones internas dentro del partido de Massa, incluyendo al hijo de Cristina Fernández, quien ha hecho una propia corriente dentro del kirchnerismo.

Ahora, Milei tendrá que enfrentar el gran reto que es gobernar un país como Argentina, sin tener un grupo fuerte que lo acompañe, sin mayoría en las cámaras de representación, y sin ninguna provincia, de las 24 que hay en ese país, que gobierne su partido.

Milei lo dijo en su primer discurso como virtual ganador: “Hoy inicia la reconstrucción de Argentina”.

Milei obtuvo poco más del 55 por ciento, mientras que su contendiente, Sergio Massa, obtuvo 44 por ciento.

Fue una diferencia de 12 puntos y más del 73 por ciento del padrón electoral salió a votar. En Argentina, la participación de la gente en las elecciones previas a esta segunda vuelta, fue de poco más del 77 por ciento de los electores.

Javier Milei, el llamado “Trump argentino”, por sus ideas radicales y, en muchas ocasiones, absurdas, llegará oficialmente al poder el próximo 10 de diciembre, cuando termina el periodo del actual presidente, Alberto Fernández.

La transición en Argentina es muy corta, de tan sólo 19 días. En este periodo, Milei tendrá que definir cómo va a  gobernar y adecuar sus promesas de campaña a la vida real de lo que puede hacer un presidente.

Probablemente reducirá de 18 a 8 las secretarías de Estado. Pero de eliminar el Banco Central, como lo había propuesto en campaña, ya no lo dijo en su discurso como presidente electo.

Su primer reto será el Congreso, pues deberá convencer a la mayoría para poder cumplir sus promesas de campaña.

Su partido, La Libertad Avanza, tiene sólo tres diputados nacionales (Milei; su compañera de fórmula, Victoria Villarruel, y Carolina Píparo), pero pasará a tener 38 de las 257 bancas en la Cámara baja (menos del 15 por ciento) y en el Senado, 7 de las 72 (menos del 10 por ciento). No hay registro en la historia de un gobierno que haya asumido con tan poca cantidad de legisladores.

Además, Argentina atraviesa una de sus peores crisis económicas y será el mayor problema que deberá hacer frente y superar. Actualmente, Argentina reporta una inflación anualizada de 143 por ciento y cada día crece la pobreza.

Recordemos que Milei prometió eliminar el Banco Central y dolarizar al país para terminar con la emisión monetaria y la inflación. Incluso, tras los primeros resultados que le daban la victoria, el país reportó un incremento en la compra de dólares y un alza en las criptomonedas.

No se entiende por qué Argentina, siendo un país productor de tantas cosas, sobre todo de granos, no tiene una economía mucho más estable. Por ejemplo, la crisis en Ucrania hubiera podido ser una oportunidad de exportación de productos que no ha podido exportar Ucrania, que hoy está en guerra con Rusia.

Evidentemente, Argentina necesita una vuelta de tuerca en  su economía y en sus políticas públicas. Por eso ha tenido tanta aceptación la propuesta de Milei.

Ahora hay que esperar a ver cómo lleva estas propuestas a la práctica y si logra que sean exitosas.

Pero hay un punto que preocupa sobre el tema de derechos humanos. El tema de la dictadura de los años 70 y 80 en Argentina. Milei minimiza el número de desaparecidos y ha sido apoyo para militares que se encargaron de desaparecer a muchas personas.

Su vicepresidenta, Victoria Villarruel, defendió durante un debate a un exrepresor de la dictadura que fue condenado cinco veces y usó una finca familiar como campo de tortura.

Victoria Villarruel los considera “presos políticos víctimas del kirchnerismo”, y ahora que ocupará la vicepresidencia también se encargará de los ministerios de Seguridad Interior y Defensa Nacional.

Además, Villarruel evitó contestar a la pregunta de si abogaba por la libertad de los genocidas, y salió por la tangente al hablar de las demoras en los juicios.

La hermana de Milei, quien es su persona más cercana, también ha generado polémica por sus posiciones radicales contra los derechos humanos.

Esta elección es el resultado de los pésimos gobiernos que ha habido en Argentina. Ahora queda esperar a ver cómo puede gobernar Javier Milei, que enfrenta un reto enorme y tiene sólo cuatro años para dar resultados, si no, perderá la reelección.