Como anillo al dedo

TEATRO DE SOMBRAS

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El 2 de abril pasado, el Presidente López Obrador afirmó que la crisis provocada por el Covid-19 le había venido como anillo al dedo a la Cuarta Transformación. ¿Por qué lo dijo? ¿Fue una declaración hecha al calor del momento? Yo no lo creo. Podemos distinguir, por lo menos, tres razonamientos para concluir que la pandemia, en efecto, ha servido a los intereses del nuevo régimen.

El primer razonamiento es estratégico. La pandemia ha funcionado como un poderoso distractor de todos los demás asuntos nacionales. Mientras la gente esté ocupada con ese asunto, la Cuarta Transformación podrá avanzar con mayor facilidad en sus objetivos principales.

El segundo razonamiento es político. La pandemia ha debilitado a las fuerzas opositoras al nuevo régimen. En la lógica binaria que ha impuesto el Presidente, todo lo que perjudica a sus enemigos y ayuda al régimen es bienvenido y todo lo que los beneficia y los sostiene es maldecido. La polarización se ha agudizado, pero eso es, precisamente, lo que busca el Presidente para acelerar el proceso de transformación hacia un régimen populista. Lo dijo así, con brutal claridad, el 6 de junio: “o se está con la transformación o se está en contra de la transformación del país”. La política de las “medias tintas”, la de la democracia representativa liberal, es cosa del pasado.

El tercer razonamiento —acaso el más importante— no es estratégico ni político, sino ético. El 12 de junio, el Presidente presentó un decálogo para salir de la pandemia. Destaco aquí los siguientes cuatro principios: “(3) Actuar con optimismo y buen estado de ánimo para enfrentar la adversidad”, “(4) Dar la espalda al egoísmo e individualismo para optar por la solidaridad”, “(5) No dejarse envolver por lo material y evitar el consumismo” y “(10) Buscar un camino de espiritualidad, aunque éste no sea religioso”. López Obrador piensa que la felicidad se encuentra en la sencillez, en la austeridad, en la pobreza digna. Por lo mismo, la crisis económica producida por la pandemia será la matriz de la regeneración moral. Si complementamos el decálogo con otras declaraciones de López Obrador durante el periodo de la pandemia, podemos llegar a la conclusión de que el Presidente piensa que hay una ética de la abundancia que promete crecimiento económico y mayor riqueza para todos, mientras que hay otra ética, la suya y, por añadidura, la de la Cuarta Transformación, que consiste en una ética de la austeridad que no promete mayor igualdad económica o mayor distribución de la riqueza, sino una vida más austera, menos materialista, más espiritual. Las tragedias hacen que volteemos la mirada hacia nosotros mismos, que nos replanteemos nuestras metas, que revaloremos lo que tenemos. López Obrador piensa que la pandemia le vino a México como anillo al dedo no sólo para transformar su régimen político, sino para regenerar su régimen de vida.