Horacio Vives Segl

Trump y Menem

ENTRE COLEGAS

Horacio Vives Segl
Horacio Vives Segl
Por:

Para Noé, Monserrat y Francisco 

Por la pérdida de Josefina “Jose”, con infinito cariño y gratitud

Dedico la colaboración de esta semana a tratar dos temas importantes en el ámbito internacional: el segundo juicio político a Donald Trump y el fallecimiento del expresidente argentino Carlos Menem.

Trump y una victoria pírrica. Para los simpatizantes de los movimientos populistas, que celebraron con júbilo que Donald Trump haya sido absuelto de un nuevo juicio político en su contra, conviene poner unos hechos en contexto. De entrada, lo obvio: que es el único expresidente que ha sido sometido a un proceso de impeachment en Estados Unidos, además del único individuo que ha sido acusado dos veces en ese proceso. ¡Vaya honor!

Hay que poner bien en claro los saldos políticos reales de un juicio que de antemano se sabía que estaba perdido. Aníbal Pérez Liñán, el politólogo argentino que con más acuciosidad ha estudiado estos procesos, llega a una conclusión contundente: su viabilidad siempre depende del escudo legislativo que recubra al presidente, o sea que, más allá de la gravedad de las faltas cometidas (¿alguien razonable tiene duda que alentar al supremacismo blanco y al terrorismo, atentar contra la democracia y poner en peligro la vida de su vicepresidente Pence, de la líder demócrata Pelosi y de los demás parlamentarios y personal del Congreso no son razón suficiente?), el sistema bipartidista, la exigente mayoría requerida y el tamaño de la bancada republicana en el Senado hacían prácticamente imposible que el juicio concluyera en una condena.

Ciertamente, en la Cámara Baja para los demócratas fue sencillo usar su mayoría absoluta, a la que se sumaron 10 congresistas republicanos, para detonar el impeachment; pero conseguir los dos tercios que hacían falta en el Senado siempre se vio sumamente improbable, si no de plano imposible. Con todo, en la votación a los 50 senadores demócratas se sumaron 7 republicanos, con lo que sólo quedaron a 10 votos de alcanzar los 67 requeridos.

Trump enfrentará, de todos modos, varias acusaciones penales y civiles ante diversos tribunales —los que, se espera, no serán tan benevolentes con él como lo fueron 43 senadores de su partido—. Veremos.

Menem y su controvertido legado. En los años noventa del siglo pasado, el referente de la política argentina (y no necesariamente por buenas razones) fue Carlos Menem. En su prolífica vida pública consiguió todo a lo que podía aspirar: presidente de su partido, legislador nacional, gobernador riojano y presidente de la República en dos ocasiones. Ícono del peronismo y de los liderazgos populistas de los noventa que azotaron a Latinoamérica, en lo económico fue el archineoliberal artífice del muy polémico adelgazamiento del Estado argentino y de la convertibilidad cambiaria, mientras en lo político obtuvo un importante acuerdo, el “Pacto de Olivos”, con el expresidente Raúl Alfonsín, personaje clave de la transición argentina, para que se aprobara una reforma constitucional —algo dificilísimo de conseguir en la nación austral— que lo habilitara para un segundo mandato presidencial.

Referente de la frivolidad y la corrupción política argentina del siglo pasado, fue procesado por la justicia e intentó volver a ser presidente una tercera ocasión en 2003, dividiendo el voto peronista y dejando así a Néstor Kirchner sin la posibilidad de ganar en una segunda vuelta.