Morena no es invencible

De las seis elecciones para elegir Gobernador o Gobernadora que se definirán el próximo 5 de junio, quiero hablar de la de Durango, que al parecer es la que genera atracción y que podría ser una de las que Morena no ganará. Sin dejar de mencionar que Aguascalientes se da por descontado, para la alianza que encabeza el PAN con Tere Jiménez.

En Durango la elección está para probar la teoría de que Morena no es invencible, que los programas sociales son falibles y que la fuerza del Estado puesta en una elección, no es suficiente para ganar cuando se plantea un escenario en que la sociedad tome participación directa.

La coalición de fuerzas, hablando de los partidos es importante, pero no es lo más relevante, lo verdaderamente importante es la gran alianza que se ha conformado al lado de la sociedad, con una candidatura que tiene como eje central a los habitantes, a la sociedad, las mujeres, los jóvenes, los adultos mayores, los hombres, el campo, los empresarios, los temas forestales, el sector organizado en la parte comercial y el etcétera que es amplio.

La virtud de la campaña que encabeza Esteban Villegas, de la alianza PRI, PAN y PRD, está en lo que la ciudadanía quiere para su futuro, está en la posibilidad de que la polarización que se pretende desde las esferas de la Cuarta Transformación no encaja con la necesidad de los duranguenses de salir adelante.

En Durango la gente quiere mantener su trabajo y mejorar su salario, la sociedad demanda que la seguridad se mantenga y que no pase lo que ha pasado en menos de un año en 5 de los estados que estrenaron gobiernos de Morena, y que son los que encabezan los escenarios de violencia más agravados en México.

Esta alianza con los ciudadanos de Durango plantea de manera clara la oportunidad de aspirar. De aspirar a estar mejor y ve a la política como la actividad más noble y legítima del ser humano, que se organiza como pueblo por el bien común y no como el ansia desmedida de conseguir el poder.

La alianza ciudadana en Durango plantea llenar el vacío que han dejado los partidos políticos, reivindicando nuevamente y en los mejores términos la figura del político, del servidor público interesado en la cosa pública, preocupado por sus semejantes, interesado en el bienestar de todos.

En Durango los ciudadanos son quienes le están dando un fuerte impulso al sistema democrático que considera al pueblo como el titular de la soberanía.

Aspirar a dirigir un estado es un asunto muy serio, van de por medio vidas, miles de vidas, que significan satisfacción de alimentos, vivienda, salud, educación, empleo, ingresos, protección social, seguridad pública, justicia, y en conjunto estabilidad política, paz social, desarrollo y Estado de derecho.

Eso es lo que está haciendo la diferencia en la elección de Durango y por eso estoy convencido de que el 5 de junio, Esteban Villegas, será gobernador.