Buscan trasladar 35% de vuelos del AICM a Santa Lucía

GENTE DETRÁS DEL DINERO

*Esta columna expresa el punto de vista de su autor, no necesariamente de La Razón.
*Esta columna expresa el punto de vista de su autor, no necesariamente de La Razón.
Por:

Aunque en su momento el ahora exsubsecretario de Transportes, Carlos Morán, dijo que se buscaría que las aerolíneas disminuyeran sus operaciones en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México una vez que llegase a su nivel de saturación a fin de que se trasladaran a la terminal de Santa Lucía, ahora se sabe que en la SICT existe un plan concreto: reducir el actual parámetro de saturación establecido en 60 despegues-aterrizajes para que 35% de los vuelos se trasladen a la instalación militar, que dirige el general Isidoro Pastor.

Ello, básicamente, implica manipular las condiciones de oferta de infraestructura aeroportuaria en el Valle de México. Para ello, como lo dijo el mismo Isidoro Pastor, se subsidiará con casi mil millones de pesos anuales la operación de Santa Fantasía hasta 2026 para obtener 60 operaciones diarias en el primer año y lograr 120 dentro de 4 años para llegar al “punto de equilibrio”. Ánimo, ya hay 8 diarias comprometidas por Viva Aerobus, de Roberto Alcántara, y Volaris, que lleva Enrique Beltranena. Es probable que, dada la presión política, Aeroméxico —igual de lo que sucedió durante el gobierno de Felipe Calderón y Enrique Peña— lleve algunos vuelos a Santa Lucía y mantenerlos para revisar si son o no rentables. Las aerolíneas estarán ahí hasta donde las pérdidas lo permitan y las ganancias las impulse a crecer ese mercado.

De hecho, algunos de los arrendatarios de espacios comerciales —a los que no se les cobra renta, sólo un porcentaje sobre ventas— calculan que en caso de éxito, tendrán 6 meses de pérdidas.

La viabilidad económica del aeródromo depende por tanto del número de vuelos y volumen de pasajeros. Por ello, el interés ahora de reducir en 35% el umbral de saturación del AICM (afectado por la impuntualidad de operaciones y con crecientes riesgos de colisiones provocados por el “rediseño del espacio aéreo” efectuado por el equipo de Víctor Hernández en Seneam) para literalmente alimentar Santa Fantasía con vuelos artificialmente excedentarios en el AICM.

Afianzan terrenos para el Interoceánico. En tanto, el proyecto del corredor logístico que conectará a Salina Cruz con Coatzacoalcos registra avances importantes en la conformación de los parques industriales que le darán valor agregado al proyecto encomendado a Rafael Marín Mollinedo: los dos predios que faltaban para completar los 10 necesarios para la integración de parques industriales, ya están en proceso de ser obtenidos para la empresa logística de propiedad estatal. Ambos terrenos faltantes se encuentran en proceso de donación: uno lo donará la Sader, que encabeza Víctor Villalobos y otro el Gobierno de Veracruz, de Cuitláhuac García. Veremos qué administración es más eficiente para impulsar un proyecto que promete cambiar el rostro rezagado y de miseria del sureste mexicano. Ya con los 10 predios en su haber, el Corredor Interoceánico quedará a la espera de que la SHCP, que lleva Rogelio Ramírez de la O, defina los incentivos fiscales para las empresas que ahí se instalen.

IMSS Quintana Roo: la Piña de Laurita. La alianza PAN-PRD por la gubernatura de Quintana Roo tendría que haber sido más suspicaz y analítica cuando eligió a Laura Fernández Piña como su candidata a gobernadora. Parece que ni Jesús Zambrano ni Marko Cortez se enteraron de los 65 millones de pesos con que Fernández Piña dejó embarcados a los trabajadores de Puerto Morelos durante su gestión como alcaldesa quien, con verde naturalidad, dejó de pagar las cuotas patronales al IMSS durante dos años. Hubiesen sido cuidadosos en indagar los presuntos lazos que presuntamente unen a Fernández Piña con Jorge Emilio “El Niño Verde” González y el exgobernador Félix González Canto, pues ahora la bronca es nuclear: el subdelegado del IMSS, Félix Beltrán, reclamó sin éxito el pago desde septiembre por lo que podría suspender sus servicios a la burocracia local. ¿Se la imaginan de gobernadora?