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Situación atroz en Colima

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Rozones*Esta columna expresa el punto de vista de su autor, no necesariamente de La Razón.
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*Esta columna expresa el punto de vista de su autor, no necesariamente de La Razón.
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Las cosas, nos dicen, no podrían estar peor en el pequeño estado de Colima que gobierna la morenista Indira Vizcaíno. Apenas el mes pasado, un organismo internacional colocó a la entidad como epicentro de los asesinatos en América Latina. Y en estos días, la organización Causa en Común la puso en rojo por el alarmante incremento en atrocidades, las cuales crecieron casi 40 por ciento entre abril y junio de este año. Un dato a destacar es que la ONG registra 44 asesinatos de mujeres “con crueldad extrema”, una cifra muy superior a la de ocho feminicidios que reportan oficialmente las autoridades. Maquillar los datos, nos comentan, no ayuda en nada, pues la realidad de todos modos sale a la luz tarde o temprano. Y la terrible realidad que viven los colimenses se refleja con los crímenes que se cometen un día sí y otro también en la entidad costera.

Las cifras de Milgram

Relevante, nos dicen, el dato que dio a conocer la jefa de la DEA, Anne Milgram, en el sentido de que los cárteles Jalisco Nueva Generación y de Sinaloa disponen de unos 44 mil elementos en un centenar de países. Dijo la funcionaria en una comparecencia en el Capitolio que la primera organización criminal tiene 18 mil 800, mientras la segunda dispone de 26 mil. Para dimensionar la cifra, el grupo de mercenarios conocido como Wagner, que peleó en Ucrania a favor de Rusia hasta hace unas semanas, contaba con alrededor de 40 mil combatientes, pero habrían sido alrededor de 25 mil los que al final de su participación en la guerra, se sumaron a la revuelta que se enfilaba a Moscú cuando su principal líder, Yevgueni Prigozhin, pretendía confrontar a Sergei Shoigu, ministro de Defensa de Vladimir Putin, al que acusaba de haberlo atacado y de las derrotas rusas en Ucrania. Ahí el dato.

Oso de Saúl Monreal

Y quien hizo el oso de su vida fue el alcalde de Fresnillo, Saúl Monreal, al acudir a la delegación del Inegi en Zacatecas para reclamar que la Encuesta Nacional de Seguridad Pública Urbana ponga recurrentemente a su municipio en el primer lugar nacional en percepción de inseguridad. Monreal quiere que le muestren la metodología en que se basa la encuesta. Y de entrada pretendió revertir los resultados con datos del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, en donde, según él, se demuestra una baja en los índices delictivos. Alguien debería explicarle que la ENSU mide percepción y el SESNSP maneja datos fríos, por lo que no se puede equiparar ni contraponer una medición con la otra. En el Inegi le prometieron agendarle una cita para hablar sobre el tema. Seguro ahí lo sacarán de su error y entonces se dará cuenta de su pifia. Por lo pronto, prevalece el dato de que el 96 por ciento de los fresnillenses se siente inseguro.

El Inegi ante el crimen

Y hablando del Inegi y de la inseguridad, a muchos sorprendió la revelación que hizo ante diputados Susana Pérez Cadena, directora general adjunta de Censos Económicos y Agropecuarios del instituto. Y es que resulta que la funcionaria dio cuenta de cómo se las tienen que arreglar para sacar adelante su trabajo. “Hay muy diversas estrategias. En algunos casos pagar para entrar, pagar a lo mejor cifras pequeñas, pero pagar para entrar, hasta contratar personal… Una muy importante es contratar personal de la zona, que conozca muy bien a la gente de la localidad o de la zona que se está censando, y que además sea conocida de esa gente, y que sea conocida de quienes pudieran estar incurriendo en cuestiones de delincuencia”. A propósito de la realización del Censo Agropecuario 2022 apuntó que hubo algunos tropiezos. “El primer día tuvimos una persona como secuestrada, y duró varios días así y después de eso ya no tuvimos más”. Uf.

La mancha que va a quedar

Si una mancha va a quedar en el proceso de las corcholatas ésa es la de los anuncios espectaculares. Y es que claramente ha sido y sigue siendo motivo de discordia. Si no es por la cantidad, es porque no se fiscalizan, o porque se suben más y más y porque nadie los baja. Ahora fue Ricardo Monreal el que reprochó a Mario Delgado haberlo señalado como la segunda corcholata que más gasta. “¿Por qué los protege? ¿Por qué no dice la verdad? Por qué no dice Mario Delgado: Hay mil 200; hay 2 mil espectaculares, y de los 2 mil, mil 200 de uno; 600 de otro; 400 de otro, y, por tanto, se han gastado esto”, cuestionó. El zacatecano, quien desde hace semanas lleva un registro de anuncios, señaló que en ésta ya van mil 228, de los cuales ninguno es suyo. Nos hacen ver que con la definición de reglas por parte del INE, este último estaría ayudando a resolver ese lío, porque de plano la dirigencia guinda o no ha podido o no ha querido.

¿Y las firmas, apá?

Resulta que, después de tres semanas de que inició el proceso, el aspirante presidencial ciudadano del Frente Amplio por México, Israel Rivas, pidió apenas a la ciudadanía su apoyo para recabar las firmas. Faltan sólo 12 días para que se venza el plazo de recolección de apoyos ante el Comité Organizador y aspirantes partidistas como Xóchitl Gálvez afirman ya contar con 220 mil en la bolsa, 70 mil más del mínimo requerido de 150 mil. Hasta el momento se desconoce cuántas firmas llevan los aspirantes. Ninguno de ellos, ni el comité ni sus partidos, se han atrevido a hacer públicos los datos. Hay quienes especulan si es porque sigue fallando su plataforma —porque sigue habiendo señalamientos en ese sentido— para ese fin o porque, de plano, el resto de perfiles va muy rezagado. La mayoría, por cierto, se inclina hacia esta segunda opción.