Desmitificar las mañaneras del Presidente

En un ejercicio sin precedentes, el Presidente López Obrador da una conferencia de prensa todos los días hábiles a las 07:00 horas en Palacio Nacional. En sus primeros 100 días de gobierno, AMLO dio 67 conferencias matutinas y hoy llegó a la 72. Aún no existen elementos suficientes para determinar qué tan apreciadas por la ciudadanía son las mañaneras, pero sí han diferenciado al Presidente de sus predecesores, particularmente en contraste con el Presidente Peña, quien prefería comunicar en escenarios controlados.

En SPIN TCP (http://www.spintcp.com) nos dimos a la tarea de analizar las mañaneras para tener un mayor entendimiento de este fenómeno de la comunicación. Las conferencias matutinas han sido la principal herramienta de comunicación del Gobierno federal: la cuenta de Twitter de Comunicación Social del Gobierno (@ComGobiernoMX) tiene 253 tuits publicados, de los cuales el 95 por ciento tienen la etiqueta #ConferenciaPresidente o el video de la conferencia de ese día. Como principal herramienta de comunicación del Gobierno, se esperaría que las conferencias matutinas fueran aprovechadas para informar en momentos de crisis y para posicionar los temas más relevantes en la agenda pública nacional.

En momentos de crisis, las mañaneras no se han aprovechado para hacer un manejo adecuado de la información, lo cual se ve reflejado en asistencias poco estratégicas de los integrantes del gabinete: durante la incertidumbre por la recompra de bonos del NAIM, la secretaria Márquez (Economía) y los secretarios Urzúa (Hacienda) y Jiménez Espriú (Comunicaciones y Transportes) nunca asistieron a una mañanera; durante los bloqueos de la CNTE en Michoacán, el secretario Moctezuma (Educación) tuvo cero asistencias; desde el inicio de las huelgas en Tamaulipas, la secretaria Alcalde (Trabajo) nunca ha asistido; durante los primeros 17 días del desabasto de combustibles, la secretaria Nahle (Energía) asistió y habló una vez, mismo número de veces que asistió y habló en ese periodo el nieto de Emiliano Zapata. El resultado observado es que en momentos de crisis los huecos informativos persisten en la agenda y opacan los temas que al Presidente le interesa posicionar.

En cuanto al posicionamiento de temas del Gobierno, el impacto mediático de las conferencias matutinas ha sido limitado. Si se revisa la nota principal de las primeras planas de los siete periódicos de mayor circulación nacional, se tiene que únicamente el 12 por ciento (51 notas principales de 420) ha retomado algún tema del mensaje inicial que el Presidente dio en la conferencia del día anterior. Aunque el Presidente está presente durante el día en medios, no parece lograr posicionar efectivamente los temas más importantes del Gobierno en el centro de la discusión pública.

Las mañaneras ya son un referente del Presidente AMLO. Aprovecharlas para que el Gobierno informe apropiadamente aumentaría su efectividad. En el manejo adecuado de la información radica la diferencia entre un ejercicio de transparencia y un instrumento de propaganda.