Actúa la sociedad por su cuenta

Mientras en el Gobierno lopezobradorista deshojan margaritas para decidir si aplica o no y cuándo medidas de emergencia por la pandemia de coronavirus, como lo han hecho otros países que cerraron sus fronteras, se declararon en cuarentena, cancelaron vuelos de aerolíneas y suspendieron todo tipo de eventos masivos, distintos sectores de la sociedad actúan cada uno, sin esperar que los casos detectados aquí, que anoche llegaron a 93, se multipliquen y haya decesos.

El número de entidades en que se generalizó la suspensión de clases creció; universidades e instituciones de estudios superiores cerraron sus puertas; la jerarquía eclesiástica anunció la cancelación de misas dominicales; la Suprema Corte de Justicia suspendió sus actividades; en algunas dependencias, empresas y fábricas se advierte ausentismo y sigue en vilo la tradicional representación del Viernes Santo en Iztapalapa, aunque se realizará sin asistentes.

DE ESTO Y DE AQUELLO...

Ante el peor derrumbe de la Mezcla Mexicana de petróleo en 18 años, que acabó en 18 dólares 78 centavos, de la mano del peso frente al dólar que cerró en 23.16 después de rondar hasta 23.57, y el innegable avance de la pandemia de coronavirus en el país, el Presidente López Obrador convocó a una urgente reunión en Palacio Nacional a los gabinetes legal y ampliado.

Los efectos que esa situación traerá consigo en la economía del país y en los programas sociales emprendidos desde el inicio de sexenio, y el riesgo de que alguno o algunos de los  proyectos prioritarios del Gobierno tengan que ser aplazados o de plano cancelados, eran analizados al cierre de esta columna y de la que se esperaba alguna información.

Después de que el subsecretario de Salud, Hugo López-Gatell, aseguró que “la fuerza del Presidente es moral, no de contagio”, lo que le valió una oleada de críticas, su jefe le correspondió al declarar que tiene toda su confianza porque es un especialista en materia de salud y es una persona seria, honesta y responsable.

Con ello, la desgastada mañanera de Palacio Nacional fue convertida en  “club de elogios mutuos”, mientras que el número de casos de contagiados subió a 93 y arreciaron reclamos y exigencias de distintos sectores a las autoridades sanitarias para que actúen antes de que sea demasiado tarde.

Ése es el clamor que se generaliza al interior del país y que en los del exterior que padecen esa pandemia está siendo calificado unánimemente de ser una “irresponsabilidad” de que no se actúe a tiempo y se asuman medidas urgentes, que se deje de compartir el optimismo y la confianza de que, como ha dicho el Presidente, el mal no se propagará ni causará bajas y México saldrá adelante.