Sube Ramírez Cuéllar; cae Polevnsky

Sube Ramírez Cuéllar; cae Polevnsky
Por:
  • francisco_cardenas_cruz

Tal y como se esperaba, el pleno de la Sala Superior del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación validó la elección de Alfonso Ramírez Cuéllar como presidente provisional de Morena, en el Congreso Nacional Extraordinario del 26 de enero, lo que desató la furia de Yeidckol Polevnsky, quien acusó a los magistrados de haberse “empinado” y ceder a las amenazas de “la mano negra que quiere seguir teniéndolos postrados”.

La secretaria general encargada hasta ayer del mando nacional del Movimiento que fundó el hoy Presidente Andrés Manuel López Obrador, aferrada a permanecer varios meses más en ese cargo, mencionó al líder del Senado de la República, Ricardo Monreal, como uno de los que supuestamente “amenazó” a los magistrados y advirtió que “investigará qué otros senadores hicieron lo mismo”, como si olvidara quién la colocó ahí y quién fue el que la quitó, poniéndole un “hasta aquí”.

DE ESTO Y DE AQUELLO...

Arrecian indignación y protestas por los asesinatos de los pasantes de Medicina de la Universidad Popular Autónoma de Puebla que ayer suspendió clases, junto con la Benemérita Universidad Autónoma de esa entidad y otros planteles, para exigir justicia y declarar el duelo por la atrocidad que les costó la vida.

Para hoy, la UPAEP les pidió a todos los alumnos que asistan a clases vestidos de negro y se anunció un paro indefinido de actividades en escuelas y facultades de esa institución en las que además, se llevarán a cabo asambleas y reuniones para exigir a las autoridades el esclarecimiento  y captura de los autores del cuádruple homicidio.

En solidaridad a esos hechos, directivos y alumnos de otras universidades anunciaron que se sumarán a condenar lo ocurrido y también habrá paros y marchas en distintas ciudades de otros estados para demandar que gobiernos locales y el federal hagan alto para frenar tanta violencia como la que hoy se ha generalizado contra mujeres, jóvenes y menores.

Más allá de la diaria verborrea, y aun con las deficiencias de las que el sector salud del país ha dado sobradas muestras, en lo que va del sexenio, el Gobierno de México debe prepararse con seriedad a enfrentar el riesgo de que el coronavirus llegue al país y que tampoco vaya a ser utilizado como argumento para justificar el fracaso económico que se resiente en todos los sectores de la población.

Preocupa, y mucho, que ante un grave mal que ya ha costado miles de vidas en países de Asia y Europa, aquí se vaya a pretender enfrentarlo con imprevisiones y ocurrencias que se sumarían a la demostrada ineficacia e ineficiencia de algunos de los responsables de  brindar atención médica y abastecer medicamentos ante una enfermedad que aterra.