La Cruz Azul revira

La Cruz Azul revira
Por:
  • mauricio_flores

Escrita con elegancia y amabilidad, pero directa y clara, llegó a este columnista una carta del vocero institucional de Cooperativa Cruz Azul, Jorge Hernández, que reclama la falta de objetividad y equilibro en lo aquí escrito bajo el título “Cruz Azul, La Cuenta Final”, en torno a los planes que estaría haciendo el grupo disidente de esa organización para tomar nuevamente el control de la firma; en aras de la objetividad y del derecho de réplica, aquí les presento la postura de la dirección encabezada por Guillermo Álvarez.

Señala el vocero que la actual dirección ha sido avalada y ratificada por mayoría absoluta de los socios cooperativistas en activo, representados en la Asamblea General (con el 85% que se registra en eventos públicos y medios de comunicación), por lo que el grupo encabezado por José Antonio Marín y Víctor Manuel Velázquez carecen de la representatividad aquí mencionada, además de que ambas personas están suspendidas y separados de sus funciones por el Juzgado 24 y por la Sala 7 del Tribunal Superior de Justicia de la CDMX (octubre de 2018 y julio de 2019) dada la presunción de fraude por más de 500 millones de pesos sustraídos de la tesorería de Cruz Azul y deberán responder de dicha acusación

Por ello, consideran impensable que hayan instituciones financieras que apoyen a Marín y Velázquez a tomar posiciones directivas -no tiene acceso por orden judicial a los activos de la cooperativa- mientras La Cruz Azul cuenta con líneas de crédito arriba de 400 mdd y ejecuta inversiones por más de 350 mdd en sus plantas… por lo que habría una intervención grave e ilegítima de aquella institución que quisiera fondear a los disidentes como aquí se comentó.

También rechaza que haya algún expediente o investigación de la UIF contra Guillermo Álvarez y en contra de la cooperativa, debido a la transparencia con la que se conducen a la autoridad y que pedirían pruebas de lo aquí escrito, pues la especulación provocada afecta la imagen moral del organismo y sus directivos. Y finalmente rechaza que haya algún influyentismo por parte del Gobierno federal, dado el respeto del Gobierno de Andrés Manuel López Obrador a la vida institucional de las empresas.

Así las cosas.

¿Catecismos Semarnat? En lugar de impartir talleres científicos, sociales y técnicos correspondientes a su funcionamiento institucional, en la secretaría a cargo de Víctor Manuel Toledo se imparten cursos ideológicos como el de “Retos del Modelo Extractivo Minero a la 4T”, donde se expone -en presentaciones de la cuales este columnista tiene capturas de pantalla- la necesidad de “construir cambios a la política extractiva neoliberal fortaleciendo la capacidad y ejercicio institucional y la alianza con las comunidades”. También se indica que “el modelo extractivo de la gran minería es veta depredadora del capital trasnacional y trasnacionalizado”, dada la corrupción que imperó en la Semarnat, por lo que ahora se requieren cambios profundos “políticos, jurídicos y éticos (para) servirle al pueblo, no al dinero”. ¿Qué implicación tiene esto para los planes de inversión que anunciará el coordinador de gabinete económico, Alfonso Romo?