La banca como reactivador de la economía

Tips Empresariales

Por Ricardo Delfín

La correspondencia entre la economía y la banca es un termómetro que los inversionistas han comenzado a usar para evaluar su potencial de riesgo y retorno. Debe entenderse como uno de los motores para activar o reactivar una economía, puesto que las empresas y aun los gobiernos necesitan recursos para desarrollarse.

Ningún análisis sobre la banca internacional puede separarse de la crisis que puso a esta industria al borde del precipicio arrastrando instituciones legendarias. Un indicador clave actual es que cuando los países tienen problemas económicos también sufre el sector financiero, y viceversa. De hecho, instituciones y naciones por igual tienen dos opciones básicas para financiarse:

• Inyectar capital propio.

• Recurrir al fondeo externo a través de los mercados y los bancos.

La banca es un sector fuertemente regulado y sujeto a la política de los bancos centrales, además de los órganos especializados, como la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV).

Otro fenómeno reciente es la globalización de las redes bancarias, el intercambio dinámico de recursos e información, además de la forma casi instantánea en que son afectadas por la volatilidad de las variables, como las tasas de interés. Parte de esta expansión se explica porque los bancos de algunas naciones desarrolladas salieron en busca de nuevos mercados para crecer, en particular en economías emergentes, como los países BRIC (Brasil, Rusia, India y China).

Para bien o para mal, muchas fronteras fueron superadas, realidad a la que contribuyeron las tecnologías informáticas que permiten comprar, vender o mover recursos en forma remota. Como también se pueden exportar los riesgos, la regulación se ha extendido a nivel global, como en el caso de las recomendaciones sobre la legislación y regulación bancaria de los Acuerdos de Basilea.

 La banca en México. Actualmente, en México existen 22 grupos financieros, 46 instituciones bancarias y seis bancos de desarrollo. Además de las marcas bien conocidas, hay instituciones con perfiles específicos:

• Bancos de nicho.

• Casas de Bolsa.

• Sofoles (Sociedad Financiera de Objeto Limitado).

• Sofomes (Sociedad Financiera de Objeto Múltiple).

• Aseguradoras.

Los ocho mayores bancos representan 80% de los activos, 79% son de capital extranjero y 21% nacional. Curiosamente, en el top ten la mayor participación no pertenece a Estados Unidos y Canadá, sino a países europeos como España, Reino Unido y Alemania.

El modelo, sin embargo, se invierte cuando se revisan los bancos especializados (en una parte del mercado, típicamente cadenas comerciales, tiendas de autoservicio y departamentales, o bien para financiamiento automotriz). En México, 93% de estos bancos son de capital nacional y sólo 7%, extranjero.

En síntesis, la banca evolucionó a una propiedad predominantemente extranjera en el mercado empresarial y de consumo, y de capital nacional en los mercados especializados. De hecho, como parte de su negocio, capta recursos del público y los encauza hacia actividades productivas o de consumo.

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