La carta que convenció a Obama

La carta que convenció a Obama
Por:
  • kenji_lopez_cuevas

Antes de dejar la Casa Blanca, firmó una Ley por 6,300 millones de dólares para salud

“Me llamo Kathryn Green, soy mamá de una bebé de 14 meses, soy profesora de secundaria en Los Ángeles y esposa de un hombre que lucha contra cáncer cerebral. También les escribo para ofrecer mis condolencias por la pérdida del hijo del Vicepresidente; su familia estuvo en mis oraciones cuando escuché la notica”.

Así comenzó la carta que Kathryn envió a la Casa Blanca pidiendo que continuara el apoyo a las instituciones de salud que atienden a su esposo. Ella no sólo mostró su dolor personal, también fue empática con el dolor ajeno: el de Joe Biden, Vicepresidente de los Estados Unidos, quien perdió recientemente a su hijo a causa del mismo tipo de cáncer.

La de Kathryn, es una de las 3 cartas que muestra el sitio oficial de la Casa Blanca como las impulsoras de convencer, al aún Presidente de los Estados Unidos de Norteamérica, Barack Obama, de impulsar la denominada Ley de Curas del Siglo XXI, aprobada en el Congreso estadounidense, y que destinará 6,300 millones de dólares para la investigación y tratamiento del cáncer, el Alzheimer y el combate de adicciones.

Esta Ley tiene varios objetivos, pero uno de los principales –usando al menos 1,600 millones de dólares para ello— es: “hacer que los Estados Unidos sea el país que halle la cura contra el cáncer de una vez por todas”. Así lo dijo Obama en uno de sus últimos mensajes semanales emitido en Washington, DC.

Estoy seguro que lo que movió a la Casa Blanca a impulsar la Ley de Curas del Siglo XXI no fue sólo la carta de Kathryn, o las 60 escuelas de medicina, los 36 hospitales o las varias docenas de organizaciones de médicos que no descansaron hasta la firma de dicha Ley; fue la empatía del Vicepresidente Joe Bidden respecto al tema del cáncer, gracias a la lucha que vivió a un lado de su hijo.

Estimado lector: la voluntad de nuestros líderes tiene la capacidad de buscar y encontrar curas, de salvar vidas y de cambiar al mundo; pero nuestra voluntad también cuenta. No dejemos de escribir cartas, de levantar la voz, de esforzarnos por tener un mundo mejor. Tengamos presente la última frase de Obama como Presidente: “Les pido que crean. No en mi habilidad para lograr un cambio, sino en la de ustedes; tengan fe”.

Twitter: @klopezcuevas