Mantener lo democrático

La reforma política de 1977, bajo el gobierno de José López Portillo y la batuta política de don Jesús Reyes Heroles, abrió el registro político de varios partidos, uno de ellos el Partido Comunista Mexicano (que nació en 1919), que dirigía Arnoldo Martínez Verdugo, logrando su registro con las votaciones a diputados federales de 1979; es el que ahora tiene el PRD. En esa reforma se incorporaron a nuestro sistema político electoral las fórmulas de representación en la Cámara de Diputados.

Los argumentos de JLP-JRH eran que “el perfeccionamiento de las instituciones democráticas busca que las minorías estén representadas en proporción a su número y que no sólo expresen libremente sus ideas, sino que sus métodos de pensar puedan ser considerados por las mayorías al tomar decisiones. O, en otras palabras, que el pensamiento de las minorías tenga significado político e influya en las decisiones gubernamentales”. (Notas de JLP sobre la reforma política 1977. Ed. especial).

En 1977 se enviaron las iniciativas de “reformas constitucionales al Congreso de la Unión que establecerá un sistema mixto de dominante mayoritario con representación proporcional. No se trata de caer en la disgregación. Se pretende que las mayorías sigan gobernando, pero que las minorías estén representadas de conformidad con su fuerza numérica y sus opiniones cuenten y se sopesen en las decisiones legislativas”.

Cierto, eso fue en 1977 y no queremos regresar a 1976.

Con esta reforma incorporando las listas plurinominales dio inicio al camino para terminar con la hegemonía del partido único de Estado; que el Legislativo dejara de ser instrumento del Ejecutivo, y que realmente se discutieran desde el presupuesto hasta los mínimos cambios constitucionales o elaboración de leyes. Antes todo era a partir de la firma de un solo hombre; ahora a concertar como debe ser en el parlamentarismo.

Volver al sistema de sólo distritos de mayorías es volver al dominio de un solo partido o grupo económico. No estaría representada en suma la mayoría de los ciudadanos, y menos si se gana con porcentajes bajos.

Ayer en la primera plana de La Razón aparecieron los cuatro miembros del gabinete, que se dice que alguno de ellos puede ser el candidato a la Presidencia por el PRI; expusieron sus tesis sobre el quehacer en México y cada uno a su hora. El primero a las 9 horas José Antonio Meade; a las 10, Aurelio Nuño; a las 11, José Narro y, a las 12, Miguel Ángel Osorio Chong. Y se presentaron no en orden alfabético, ¿cuál sería la razón?. El Presidente Enrique Peña Nieto dijo que se sabrá antes del 14 de diciembre, ¿una semana, un mes..? Sigue el misterio sexenal.

Fue una especie de ¡arrancan!