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Al local ubicado en el número 2 de la calle Carrillo Puerto, de Coyoacán, aún llegan algunos despistados en busca de libros, pero El Parnaso se encuentra cerrado. Lo está desde el 15 de julio.
“Fue muy importante los primeros 12 o 15 años. Los primeros 10, sobre todo. Fue el punto de referencia de intelectuales y gente del barrio”, recuerda la escritora Margo Glantz.
A través de los vidrios de la puerta de acceso todavía se observan hileras de libros y discos. Ayer era un centro de reunión en que se podía acudir para debatir, tomar café y adquirir obras de autores reconocidos y otros nuevos valores. Hoy está convertido en un cementerio de libros. Sólo recuerdos quedan de aquel local fundado en 1980 por Antonio Sultán y su tío, Mauricio Achar, dueño de Gandhi.
Los propietarios del local, Silvia González y Marco Antonio Robles, quienes viven en la parte alta de la librería, sólo esperan la resolución final a mediados de agosto a una demanda interpuesta en julio del año pasado por el incumplimiento en el pago de la renta, establecida en 100 mil pesos mensuales.
“Nosotros no queríamos llegar a esas instancias, pero el señor Sultán se rehusó a cubrir la renta del local, además dejó de pagar lo correspondiente al agua y el predial”, afirmó en exclusiva para La Razón Marco Robles.
El monto total del adeudo establecido en la denuncia presentada, explicó el abogado Miguel Ángel Cardoso, es de 114 mil pesos: 100 mil pesos de renta del local, seis mil por concepto de agua, y ocho mil de predial.
Robles detalló que su arrendatario Antonio Sultán incumplió el contrato que ambos firmaron en 2006 por cuatro años. “Desde el inicio hubo anomalías.
Para evitar problemas llegué a aceptar pagos en abonos, pero al manifestarme que no pagaría la renta y no se saldría, interpuse la demanda”.
Responsabilizó de la falta de liquidez a la mala administración del negocio. Los problemas financieros iniciaron en 2002, cuando empezó a recortar personal —de 40 trabajadores que llegó a tener, sólo quedaban seis en 2010—. La situación empeoró con la renovación de la calle en 2008, que trajo consigo la reubicación de artesanos y vendedores, así como un permiso para ocupar la acera de la librería como cafetería. “Eso dañó la economía de Sultán”, afirmó Robles.
El punto culminante llegó en 2009 tras el cierre de algunos establecimientos por la alerta sanitaria ocasionada por el virus de la influenza AH1N1.
Precisamente a finales de ese año, la Procuraduría Ambiental y del Ordenamiento Territorial (PAOT) recomendó a la delegación Coyoacán verificar 14 establecimientos, entre ellos el café Frida y la librería El Parnaso.
Luego de la revisión pertinente se determinó que la cafetería no contaba con la licencia correspondiente.
En 13 meses que ha durado el proceso legal, los propietarios del local ubicado en el edificio que data de 1947, han perdido un millón 300 mil pesos.
“Han llegado varias personas preguntando por el espacio, entre ellos gente ligada a la UNAM”, señaló Robles.
La otra opción sería el establecimiento de El Péndulo.
Para Antonio Sultán, el responsable del cierre de la librería que fue un icono de la ciudad de México y llegó a ser visitada por Octavio Paz, Carlos Monsiváis, David Martín del Campo, entre otros, fue: “una campaña de persecución por parte de las autoridades de la delegación Coyoacán”.
“Las arbitrariedades no impedirán que siga con este negocio. Ya ubiqué otro local”, destacó.
Sin embargo, Marco Robles mencionó que por las noches se escuchan ruidos dentro del local.
Los vecinos y algunos de los locatarios de negocios cercanos a la librería le han mencionado que Antonio Sultán ha vendido algunos de los muebles de exhibición con los que contaba El Parnaso.
Mientras tanto, el cementerio de libros afilados sigue siendo el principal escenerio que se percibe a través de los vidrios de la puerta de acceso de lo que fue El Parnaso. A él aún acuden despistados en busca de algún libro.
Debacle esperada
2008
En marzo iniciaron las actividades de remodelación del Parque Centenario en Coyoacán
2009
Durante el mes de abril la librería tuvo que cerrar debido a la contingencia sanitaria causada por el virus AH1N1
2010
Febrero. La delegación comenzó una jornada de acoso contra el librero por falta de permisos
Julio. Rompen relación arrendador y arrendatario con una denuncia de incumplimiento de pago
Noviembre. Se resolvió la denuncia en favor de los dueños del espacio
2011
Junio. Dueño de El Parnaso interpone una apelación
15 de julio cierra definitivamente la librería; sigue el proceso que se resolverá en un mes
Margo Glantz
Escritora
“Es lamentable el cierre de un espacio cultural. El Parnaso significó mucho para el barrio, pero desde que hubo intereses ajenos a los libros, se dio la mala administración”
Rafael Pérez Gay
Escritor
“Cortázar tomó café en El Parnaso... Y le escuché decir: Ya sé lo que es ser viejo y gastar una fuerza enorme en hacer algo que antes no te costaba nada, ésa es la puerta de la vejez”
30 años permaneció abierta la librería que fundó el creador de las librerías Gandhi, Mauricio Achar
El Parnaso se instaló en Coyoacán en 1980, antes era una distribuidora de best seller; y antes un banco, que duró muchos años hasta que la casa bancaria necesitó más espacio; el edifico que data de 1949 fue la Oficina Federal de la Secretaría de Hacienda.
