Foto Especial
Para una mujer, la decisión de aparecer desnuda o con poca ropa en una revista puede no ser necesariamente difícil, aunque seguramente no es fácil.
Así que cuando ocurre, hay que hacer todo lo posible porque quede satisfecha y contenta. Esa la máxima de Gabriel Pérez Osorio, director de la revista H, la publicación para caballeros que más ejemplares vende en México.
“Tener contenta” a una mujer se frasea fácil, pero en la práctica resulta complejo sobre todo si implica, al mismo tiempo, mediar entre los intereses y expectativas de esa mujer que aparecerá en la portada y los de quien comprará la revista.
En entrevista con La Razón, Gabo, como conocen sus amigos a este joven pero experimentado editor (ha trabajado en Crónica, Milenio, Publimetro y Centro) platica sobre la experiencia de dirigir H, en la que en pocos meses ha logrado que los lectores se interesen ya no sólo en las páginas de su portafolio (el apartado fotográfico) sino en las 160, gracias a la mejora de sus contenidos y su diseño.
Para empezar, ¿cómo toma una mujer la decisión de aparecer en H? Hay quienes se lo toman con mucha filosofía y lo disfrutan; hay quienes ponen en la balanza lo mismo sus valores morales y religiosos que lo que va a decir su familia, y también quien valora hacia dónde quiere llevar su carrera, o si la empresa (televisora) para la que trabajan les dará permiso... Aunque el común denominador, que es el más interesante, es que se enfrentan a sí mismas de una manera muy cruda, a lo que ellas creen que son sus defectos físicos. En alguna ocasión tuvimos algunos problemas porque una creía que se le veían las pompas grandes, así que nuestro trabajo fue ayudar y al final se usó otra con la que estuvo a gusto. Como sea estamos hablando de sus senos, de sus nalgas. Yo creo que si alguien hablara de las mías estaría poco cómodo. Entonces sí es complicado. Le haces al psicólogo y al mismo tiempo al editor.
¿Ha cambiado la idea de lo que implica que una mujer aparezca desnuda en una revista? En México no, sí es más libre que antes, por ejemplo ya hay más casas en donde el tema del desnudo ya no es un problema, y no me refiero sólo a hacerlo sino a que entre una revista de desnudos a una casa, pero si lo comparas con Europa es muy diferente. En H tenemos un portafolios principal y luego tres más, y de éstos la mayoría se hace en Europa del Este. Allá las modelos que contrata H, que les paga de manera legal, son amas de casa, oficinistas... Llegan a la sesión con sus novios, esposos, mamás, se desnudan completamente, posan, —de una manera mucho más sugerente que las de México—, cobran su dinero y se van a trabajar, a su oficina o a donde sea... Hay un asunto cultural y moral que aún permea en la sociedad mexicana. No es tan fácil que las mujeres mexicanas decidan enseñar su cuerpo.
En programas de entretenimiento se burlan de las mujeres que argumentan que sus desnudos fueron estéticos. Esos programas muchas veces marcan una pauta o reflejan una forma de pensamiento del mexicano. No hacen condenas, pero al final se burlan. Yo evidentemente no lo considero malo. Si mi hija que ahora tiene ocho meses algún día llegara a decirme quiero salir en la revista H le diría: pues negocia bien, saca una buena lana (risas).
¿La parte más complicada de la negociación para que una mujer se desnude es lo moral o lo económico? Hay una área que se encarga de eso en la empresa, pero si tuviera que dar una respuesta tendría que decir que del cien por ciento de los factores de la decisión el 60 tiene un peso moral, un 20 o 25 laboral y un 15 o 20 por ciento económico.
A propósito de contenidos, hay revistas para caballeros que incluyen entrevistas de fondo, reportajes. Este año tuvimos un reportaje sobre sadomasoquismo en México, perfectamente escrito, bien reporteado. El tema nunca le va a dar un premio nacional de periodismo a la revista y la revista no lo busca, lo que quiere son cosas que vendan, que le interesen a la gente. Lo que yo estoy intentando es traer personajes en la revista.
Hay revistas que te dan estatus, ¿ocurre eso con H? H la compran hombres y mujeres de todas las clases sociales, tenemos fans intelectuales y también barrenderos. En H no aspiramos a que la revista esté en la sala de la casa de nadie.
¿Entonces en qué parte? En tu cuarto, en el baño, en los lugares donde pueda ser útil (risas).
“Hay quienes se lo toman con mucha filosofía y lo disfrutan; hay quienes ponen en la balanza lo mismo sus valores morales y religiosos”
Gabriel Pérez Osorio
Es director editorial adjunto de la revista H En 2003 participó en el partido México Posible
Fue coordinador del portal de La Crónica y luego editor de Mundo y Nacional.
Se desempeñó como Director de Milenio Hidalgo
1999 fue el año en el que salió el primer número de la publicación
2006 fue el año en que se lanzó la primera publicación de H Extremo, con Cecilia Galeano como protagonista
Más que piel: investigación
» En los últimos años las revistas dedicadas a los hombres, además de resaltar la belleza femenina, se han preocupado por ofrecer a sus lectores contenidos de calidad, con trabajos periodísticos.
Temas de deportes, política, economía, entretenimiento y cultura son abordados por las revistas H, Playboy, Zoo, FHM y GQ.
Con ello tratan de hacer un producto editorial integral donde no solamente haya buenas imágenes —lo más importante para estas publicaciones— sino que ofrezca información valiosa para los lectores.
