Impresionante la presencia del instrumentista chino Le Yu en la Nezahualcóyotl

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Foto: larazondemexico

El fin de semana pasado (29 y 30 de julio) la Orquesta Sinfónica de Minería (OSM) presentó el quinto programa de su Temporada de Verano 2017 en la Sala Nezahualcóyotl del Centro Cultural Universitario (CCU) de la UNAM.

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Director invitado, el chileno Maximiano Valdés en la conducción de una gala conformada por Obertura de El Holandés errante, de Richard Wagner, Rapsodia Prisma para marimba y orquesta, de Keiko Abe –solista, Le Yu-, y Sinfonía No. 2 en do mayor, de Robert Schumann.

Primera parte de la velada. Obertura de la ópera El holandés errante: la OSM ejecuta esta pieza con oficio siguiendo las líneas clave del compositor alemán.

En la ópera están presentes las obsesiones temáticas de la ‘poética wagneriana’: la condenación, la autonomía, la ambición y presencia de la muerte como única convicción de salvación. La conducción de Valdés subraya y enfatiza los pasajes en que la música, vital y vehemente hace una clara distinción de la presencia espectral del holandés. Flautas, oboes, clarinetes, fagotes, trompetas y percusiones subrayan la fuerza de esta obertura que siempre produce en los oyentes un sentido de pasmo y extrañeza.

Prosiguió la gala con Rapsodia Prisma para marimba y orquesta, de la japonesa Keiko Abe, con el chino Le Yu como solista. Pieza en que el intérprete explayó toda su técnica precisamente en pasajes que requieren gran habilidad. La geometría rítmica propuesta por Abe es glosada por la OSM con axiomática concordia instrumental de percusiones, metales y cuerdas.

Impresionante el arrojo de Yu en la consumación de las ‘cadencias espaciales’ y en dos solos descriptivos en que una luz traspasa los compases y las acentuaciones se adueñan de los balances armónicos. Le Yu es un virtuoso de fervorosa devoción por su instrumento. Regaló un encore en el que mezcla aires de hip hop y citas pop vestidas de tabaleos de funk.

Segundo tiempo. Sinfonía No. 2, de Schumann. Una orquesta que suscribe los ánimos románticos del compositor desde vigorosa lectura de los metales, sobre todo las trompetas. Incitante adagio espressivo en que las cuerdas dibujan sentimentales episodios melódicos. Pujante allegro molto vivace con los metales y percusiones protagonizando efusivos pasajes.

El próximo fin de semana (5 y 6 de agosto), la OSM presenta el sexto programa con composiciones de Mijaíl Glinka, Serguei Rajmáninov y Nikolai Rimsky-Korsakov. Pianista invitada: la virtuosa Natasha Paremski. Director invitado: Aram Demirjan. Sala Nezahualcóyotl del CCU. Sábado, 20 horas. Domingo, 12 horas.

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