Max Ehrsam (Ciudad de México, 1950) ha publicado cuentos y artículos en revistas mexicanas y estadounidenses. Profesor universitario de Lengua y Literatura, se desempeña como editor de libros de textos escolares. La noche se me fue de las manos (Alfaguara, 2019) es su primera incursión en los espacios de la novela. Fábula que sorprende por la efectividad en el relato de una relación amorosa en que dos varones se ven sitiados inducidos por la seducción física que los acosa desde el primer momento que chocan las miradas.
Narrada en primera persona, no hay alusiones al futuro sino a la descripción de una fogosidad erótica en las plazas de un presente atribulado y cabalgante que se va agrietando por el consumo de drogas y por un pasado que se vuelca sobre los protagonistas hasta un final punzante y a la vez hilvanado en sumarios fatales.
“Es una novela gay, sin intermediarios ni atmósferas atenuantes en lo sexual. Dos hombres se desean y eso se relata de manera natural. Pero, cualquiera que se haya enamorado puede identificarse con estos dos seres perseguidos por la pasión suscrita en el deseo corporal. Narro desde mi experiencia homosexual, es la que conozco. Una relación que se desmorona por el descontrol en el uso de las drogas”, comentó en entrevista con La Razón, Max Ehrsam.
"Yo pretendo que los lectores se adentren en la historia, que entren a la trama y se hagan amigos de los protagonistas. Una historia de amor siempre tiene puntos de contactos con nuestras experiencias”
Max Ehrsam
Escritor
¿La mirada como acicate de una atracción desbordada? Ellos se miran en la mañana y el azar los hace coincidir en la noche. Sí, esa mirada es un primer diálogo erótico entre los protagonistas. La pulsión amatoria nace esa mañana en que las miradas de ambos marcan lo que sucederá después.
¿Narrador en primera persona irónico y fervoroso? El narrador es, sobre todo, un observador capaz de ficcionar el mundo que lo rodea. Lo hace con humor e ironía. Vuelca el amor sobre el otro, pero muchas veces le hace reproches a Nate. Dos personajes complejos desavenidos con el deseo a cuesta. Demuestran cachondería en los bares.
¿Guiños a la novela de iniciación referida en episodios de la infancia? En realidad, no hay intención de construir un relato de aprendizaje. El pasado, porque a través de esos sucesos el lector los conoce mejor. Narración estancada en el presente con el pasado que irrumpe de manera determinante en la trama.
¿Cómo pudo evadir los lugares comunes en una trama de exaltación amorosa? Por la actitud del narrador, quien se burla de sí mismo e incluso da señales de inseguridad con su autoestima. Un personaje que delibera todo lo que ve, pero en realidad, cuestiona sus propios fracasos.
¿Elementos autobiográficos? Tal vez, algunos episodios de la infancia. Los personajes son un collage de muchas personas que han tenido contacto conmigo.
¿Final especulativo? No quiero decir qué sucedió: que sea la lógica de la narración la que edifique el final.
La noche se me fue de las manos
Por Max Ehrsam
Los clientes del Starbucks vuelven a sus libros de texto, sus computadoras, sus conversaciones templadas. Me quedo sin nada que hacer, más que esperar a Fadi. Observo por la ventana a la poca gente que está en la calle: bultos de ropa que intentan caminar con prisa sobre las aceras cubiertas de hielo. A mi lado, del otro lado de la ventana, pasa un hombre que me llama la atención porque no lleva gorro de invierno y porque, sin detener el paso, vuelve la cabeza para verme la cara. Entra al Starbucks por la puerta principal, que está a tres metros de mí. Una vez que ha entrado, me mira otra vez. Le sostengo la mirada, no tanto por curiosidad o valentía, sino porque —desprevenido— no sé qué hacer con los ojos. Entonces me sonríe: una sonrisa de calendario, de anfitrión de programa de concursos. Su sonrisa es ensayada, pero efectiva: me ha persuadido. Le sonrío también. Abro la boca para decir hola, pero no digo nada.
Lo veo caminar hacia el mostrador y hablar con la cajera. Lleva botas de invierno, jeans y una chamarra de edredón negra. Es perfectamente rubio; tanto, que a la distancia es difícil saber dónde termina su nuca blanca y dónde empieza su pelo, cortado a la usanza de los militares. Tiene las orejas coloradas por el frío [...]
FRAGMENTO TOMADO DEL LIBRO.
La noche se me fue de las manos
Autor: Max Ehrsam
Género: Novela
Editorial: Alfaguara, 2019
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