Con cuatro goles en la primera mitad el PSG no tuvo complicaciones para vencer en los octavos de final del Mundial de Clubes por 4-0 al Inter Miami de Lionel Messi, que reciben su peor goleada en casi año.
La última ocasión que Miami y Messi perdieron de manera abultada fue el 6 de julio del 2024, cuando cayeron ante el FC Cincinnati por marcador de 6-1, una diferencia de cinco anotaciones.
Con goles de Achraf Hakimi, Tomás Avilés (en propia puerta) y doblete de Joao Neves, el Paris Saint-Germain aplastó al criticado Miami y ahora su rival será el Bayern Múnich, que venció al Flamengo de Brasil en un juegazo que terminó 4-2.
PSG gana con lo hecho en la primera mitad
El PSG es el tercer equipo en este Mundial de Clubes que se va al descanso con una ventaja de cuatro o más goles, junto a la Juventus 4-0 ante el Al-Ain y el Bayern 6-0 Auckland City.
Joao Neves abrió el marcador a los seis minutos, un gol de vestidor que desconcertó a Las Garzas, que hicieron de visitantes en el duelo realizado en el Mercedes-Benz Stadium. Neves logró su doblete al 39′, pues el PSG apretó el acelerador en el cierre de la primera parte y con la insistencia lograron que Tomás Avilés hiciera autogol a los 44 minutos.
Antes de irse al descanso el lateral marroquí Achraf Hakimi, quien anotó en la final ante el Inter de Milán en la final de la Liga de Campeones de Europa, plasmó su nombre en el marcador ante el conjunto de la MLS, que no encontraba soluciones en el duelo.
La intención y el parado de Miami cambiaron para la segunda parte. Messi se volvió más protagonista, estuvo más tiempo en contacto con el balón y empezaba a causar estragos en la defensa del PSG, que no quería correr peligro y marcaba al astro argentino con hasta cuatro elementos.
Messi, el mejor jugador de la segunda parte
Marcas muy pegadas y siguiéndolo a donde iba, así defendía el París a Messi, quien intentaba trasladar el balón del mediocampo a los delanteros, pero sin éxito. Pese a los constantes intentos del crack campeón del mundo, los compañeros no le correspondían el esfuerzo.
Por más veces que el ‘10′ llevaba el balón, no encontraba un jugador con quien poder hacer una pared, que tirara un desmarque o le regresara de buena manera un pase al pie.
Una curiosidad de este cotejo es que fue la primera vez que Lionel Messi se enfrentó a un exequipo. Cuando jugó en el PSG nunca le tocó medirse al Barcelona y ahora con el Inter Miami tuvo que enfrentar al conjunto parisino, que terminó la temporada como el mejor de Europa.
También se marcó su reencuentro con Luis Enrique, el entrenador que dirigió al Barcelona entre 2014 y 2017, siendo el último técnico que ha hecho del cuadro culé campeón de la Champions League. El español dirigió a Messi, Luis Suárez, Sergio Bisquets y Jordi Alba, hoy todos jugadores de Miami.
“Ha sido un partido muy especial por reencontrarme con personas con las que hemos compartido muchas cosas, muchos éxitos, también fracasos. Ha sido un partido en lo emocional perfecto”, comentó Luis Enrique.
Al mando de Luis Enrique el PSG logró algo que incluso no pudieron hacer con La Pulga en la plantilla, que fue ganar la Champions League, además de que en Francia ganaron la liga y la copa.
“En la primera parte hemos podido anularles prácticamente desde el inicio”, comentó el entrenador del PSG. “Poder saludar a jugadores antes y después del partido, algunos no jugadores si no entrenadores como Mascherano. En ese sentido ha sido perfecto para mí”, agregó.
La temporada en Europa aún no comienza y el Mundial de Clubes 2025 sirve como una suerte de torneo de preparación, pero el Inter Miami se alista para retomar sus compromisos en la Major League Soccer, certamen en donde al momento son el sexto lugar de la Conferencia Este con un récord de 8-3-cinco, a 11 puntos del primer lugar, el Philadelphia Union.
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