Foto Especial
Hijo de un director de orquesta, educado con música sinfónica y familiarizado con el violín desde los seis años, André Rieu contempla la fachada del Auditorio Nacional, escenario en el que desde ayer acompañado de la Johann Strauss Orchestra, inició la primera de sus cinco actuaciones.
“Me guío por el corazón —confiesa—. Algunas de las letras de los temas no los conozco ni entiendo su significado, pero no es necesario cuando lo que quieres transmitir es tu sentir”, menciona este connotado violinista y director de orquesta holandés, que entre los temas de su más reciente DVD Fiesta mexicana, figuran: La paloma, Jarabe tapatío, Cielito lindo...
“Son bellas melodías que lejos de ser de un sitio determinado tienen valor universal y hacen más agradable una velada.”
Apartarse de la figura del director clásico para hacer más divertida la música clásica, quitarles las caretas a los públicos que asistían a los conciertos sinfónicos más para ser vistos que para escuchar y ponerlos a bailar contagiándolos de su postura desenfadada, son las vertientes que maneja Rieu.
Una señal del Rey del vals es suficiente para dar rienda suelta a un concierto de ejecuciones e interpretaciones. La majestuosidad con las arranca notas a su violín Stradivarius de 1734 que “ya es parte de su ser” son el pretexto para deleitarse de pie, tararear o atreverse a entonar la canción.
“La música es como hacer el amor... me gusta que siempre sea distinta, por eso es bonita”, comenta el concertista nominado dentro de la categoría Espectáculo Clásico al galardón Lunas del Auditorio, cuya décima ceremonia de entrega se llevará a cabo el próximo 26 de octubre.
“He tenido el privilegio de actuar en varios países, en todos esos lugares el público ha sido un referente importante en mi carrera, pero en México hay algo más: sentimiento. Cuando pensamos en este país como un escenario nuevo, lo hicimos a manera de prueba. No hay mejor paga al calor con el que nos han recibido que entregarnos en cada show”.
Rieu asegura que en cada concierto en el recinto de Reforma habrá una alta dosis de energía y emoción: “Incluiremos varias sorpresas para los fans mexicanos. El que asista el sábado encontrará cosas diferentes a las ofrecidas el viernes”.
Sobre sus presentaciones en el 2010, comentó que las canciones no estuvieron inspiradas en compositores mexicanos: “Escuche música y me recomendaron algunas piezas. Era básicamente un tipo de música que se pudiera adaptar con Johann Strauss Orchestra”.
“Me gusta hablar con mi público, interactuar con ellos y mirar sus ojos. La gente puede esperar un concierto colorido, con hermosas melodías, vals, sorpresas, globos, tenores y nuestros encantadores sopranos”, destacó.
Auditorio Nacional
André Rieu and his Johann Strauss Orchestra
Días:
octubre 8: 20:00 hrs.; 9: 18:00 hrs.; 10 y 11: 20:30 hrs.
Costos: de 350 a 1,600 pesos
Dirección: Paseo de la Reforma 50, Chapultepec. México D.F.
Teléfono:
55 9138 1350
Web: http://www.auditorio.com.mx
