“!De panzazo¡” describe la situación de la educación en México

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Foto: Especial

México.- El documental “!De panzazo!”, del realizador Juan Carlos Rulfo, codirigido y narrado por Carlos Loret de Mola, que se estrenará el 24 de febrero en 200 salas del país, describe en una hora y media la situación de la educación en México.

Impulsado por la asociación civil Mexicanos Primero y el complejo cinematográfico Cinépolis”, entre otros, permite ver a Loret de Mola, quien se interna en las aulas de escuelas públicas y privadas, de educación primaria y secundaria.

Además, se colará hasta la oficina de Alonso Lujambio, secretario de Educación Pública, y de Elba Esther Gordillo, líder del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) con el fin de encontrar explicaciones.

A su paso observará que los problemas no son pocos, lo habrá de índole sindical, burocrático, institucional y económico, entre otros.

Las imágenes, en cierto momento chuscas, en donde nadie sabe la cifra exacta de lo que él busca, indagaciones que para su sorpresa lo llevarán a un panorama de terror.

Durante la narración del documental, las cifras arrojan que de cada 100 niños que ingresan a la primaria, solamente 45 llegarán a la secundaria, 27 al bachillerato y 13 lograrán titularse y de estos sólo dos obtendrán posgrado.

En comparación con países de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), México ocupa uno de los lugares con menor número de años cursados en la escuela por habitante, el promedio de años de estudio del mexicano es de ocho y medio.

Mientras que en Estados Unidos y Canadá, promedian 13, el resultado deja al país muy mal parado en cuestión de competencias laborales.

Loret de Mola no cejará en su intento y llevará a cabo una cruzada para buscar respuestas a un problema estructural educativo, mediante entrevistas a especialistas de educación, padres de familia, maestros y especialmente niños y niñas afectados por las políticas educativas.

Hay momentos en que el reportero se enfrentará a elementos de seguridad que le impiden el ingreso a las instalaciones del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) y las oficinas de la Secretaría de Educación Pública (SEP) para hacer una sencilla pregunta: ¿Cuántos maestros hay en México?

El público suelta la carcajada cuando el policía en turno: “Déjeme ver si lo pueden recibir”, en plena entrada de la SEP. Luego, desde abajo en la recepción la encargada del conmutador lo comunica con una persona del área de Comunicación Social, quien no atina a responder. Minutos más tarde, un funcionario baja a recibirlo.

“!Hola! ¿Cómo estás?”. Le dice, para agregar: “Precisamente estamos en búsqueda de lo que nos pides”.

En el sindicato, la respuesta de un burócrata de menor grado será que todavía no conocen esos datos y la líder Elba Esther Gordillo se niega a revelar cuánto dinero entran a las arcas del sindicato por parte de las cuotas magisteriales. “No te lo puedo decir, por estrategia política”.

Se sabe que 35 millones de alumnos asisten a clases, es un gran esfuerzo que la sociedad hace para que se mejore la calidad educativa, los maestros y directores que se encuentran al frente de las escuelas hablan sobre los problemas que les aquejan.

Una profesora comenta, que antes, cuando los educandos salían en tres años de escuela normal, estaban bien preparados; ahora aún con licenciatura tienen muchos problemas, recuerda otro con nostalgia, “el ser maestro era honorable”.

Loret de Mola sentencia en el documental que los maestros se han convertido en una subclase mediocre que sólo buscan su bien.

Pero son los estudiantes quienes sufren todas estas carencias, la táctica de los realizadores fue realizar entrevistas y talleres de vídeo, donde se les dio a algunos estudiantes videocámaras para que grabaran lo que sucede cuando el maestro no se encuentra en el salón.

Los incipientes reporteros, encarnados por alumnos, grabaron los momentos de ocio, de cuando juegan carta en el salón debido a la ausencia de los profesores.

Se dan de golpes como una manera de matar el tiempo, y hasta tienen el tiempo para escribir canciones en alusión a su situación, otros hacen pintas de graffiti con faltas de ortografía y hay quienes se arriesgan a querer entrevistar a sus maestros acerca del ausentismo de los educadores.

En el documental, en que se discute su futuro, los jóvenes saben que se encuentran en desventaja ante un examen para entrar a la preparatoria.

Sin embargo, el caso más dramático es el de los adolescentes que estudian en telesecundaria en la montaña de Guerrero, una primaria multigrado de Yucatán, los niños guerrerenses estudian sin tener televisiones ni señal.

El filme muestra a los padres de familia que se preocupan por el futuro de sus hijos, en tanto, los pequeños yucatecos estudian con un maestro que cuenta con el apoyo de la comunidad, pero aún así es difícil tener buenos resultados.

En el estudio realizado por Mexicanos Primero, ni siquiera las escuelas privadas se salvan, en el documental se destruye el mito que éstas tienen mejor educación de acuerdo con datos de la prueba PISA, test aplicado en los países miembros de la OCDE, las escuelas públicas y privadas obtienen resultados similares.

Loret de Mola compara en la película el desarrollo educativo mexicano con el de Corea del Sur en los 70, cuando tenían parámetros parecidos, ahora el país asiático es líder en educación a nivel mundial, mientras que México se ha quedado rezagado.

Ellos logran que casi el 100 por ciento de sus estudiantes lleguen a la licenciatura, en tanto que en México, apenas el cuatro lo logra.

En entrevista que se incluye en el documental, el secretario de Educación, Alonso Lujambio, no pude dar respuesta a las preguntas del periodista, y el funcionario, insiste en que se trabaja para acabar con el rezago y la mala educación.

De esta manera, el documental en un tono de humor en ocasiones negro, motiva a la reflexión e invitará a los asistentes a las salas, a involucrarse en el proyecto “EMA”, que será una tarjeta que se da quienes asistan a las película, con el fin que exijan mejores condiciones para educarse.

Daniela Alatorre, la productora de “!De panzazo!”, comentó que se visitaron 40 escuelas en seis meses, de las que se seleccionaron 15 para la filmación que les llevó ocho meses, siempre con la autorización de los entrevistados y quienes salen en pantalla para explorar la situación.

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