“Diles que me fui de gira” Johnny Laboriel

Ilustración Jesús Díaz La Razón

“Diles que me fui de gira, que luego regreso y que los quiero mucho”. Ese fue el mensaje que dejó Johnny Laboriel a sus fans, pues el intérprete de rock and roll falleció la madrugada del míercoles a los 71 años, debido a un cáncer de próstata.

El llamado Rebelde del Rock and Roll fue internado el pasado 10 de agosto en el Instituto Nacional de Cancerología, pero en días pasados fue dado de alta para pasar sus últimos momentos en casa.

“Solo quiero que se diga cuando me vaya que salí de gira y que luego regreso”, dijo el cantante en semanas recientes, según su familia, que a través de la cuenta de Facebook del artista agradeció a todos sus amigos por las inumerables muestras de apoyo y condolencias pues aseguran que para Laboriel “la gente era lo más importante”.

Originario de la ciudad de México Juan José Laboriel López, nombre verdadero del intérprete, formó parte de la ola de rock and roll de la década de 1960 junto con otros exponentes, como César Costa, Enrique Guzmán y Angélica María. Ello al incursionar en la música de manera profesional con el grupo Los Rebeldes del Rock, con el que popularizó el tema “Rock del angelito”, versión en español de “Rockin Little Angel”, de Ray Smith.

Cinco años después de la formación de la banda, en 1963, se lanzó como solista y se ganó el afecto del público. Por sus característicos y extravagantes bailes conquistó escenarios como el Hombre espectáculo, con canciones como “Historia de amor”, “Muévanse todos”, “La hiedra venenosa” y “Danny Boy”.

Laboriel se encargaba, por medio de presentaciones, de continuar vigente. El cantante planeaba celebrar sus 55 años de carrera en el Lunario del Auditorio Nacional el pasado 30 de agosto, pero el concierto fue cancelado el 21 de agosto debido a su delicado estado de salud.

En 2006, al no ser incluido en la gira Los grandes del rock, que conformaron sus compañeros de generación, aseguró: “no soy de los cuatro grandes, soy el mejor, porque los demás cuando se duermen los velan”.

Los restos del cantante fueron cremados ayer. Y según informó su hijo, Juan Francisco, parte de las cenizas será esparcida en el Bosque de Chapultepec, donde el artista acostumbraba ejercitarse, y la otra parte iría a un nicho en la Iglesia de Fátima, donde descansan los restos del padre de Johnny Laboriel.

El negro que se burlaba de su color

Johny Laboriel solía usar su color de piel para bromear en cada comentario que hacía, aunque él aseguraba que no era una forma de alentar el racismo sino parte del “cotorreo” de ser orgullosamente mexicano.

“Nací el 9 de julio de 1942 a las 9 de la mañana en la Ciudad de México, si no mira cómo estoy del smog. A mí no me trajo la cigüeña, a mi trajo el pato lucas”, esas palabras eran parte de los chistes que hacía el intérprete en sus presentaciones.

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